“Intentaron atropellar a mi cuñada para que hable”

Mercedes Salazar denunció que su hermano Edgar Ángel Piluy Sullca fue “cruelmente torturado” en predios de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) para que se incrimine en el caso Apolo. Del mismo modo dijo que torturaron a su cuñada e intentaron lanzarla bajo las ruedas de un vehículo en movimiento para que “hable”. Igual suerte sufrió su padre de 75 años de edad, de quien mediante golpes querían “obtener respuestas”.

Piluy Sullca fue acusado por la fiscalía de ser uno de los principales responsables de la muerte de tres efectivos de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) y un médico, el pasado 13 de octubre de 2013, en Apolo, en un operativo de erradicación de coca. 

“Lo han agarrado a mi hermano y lo han torturado bastante ahí en la FELCC para que diga lo que sabe, pero él no sabe nada, a su esposa también la han torturado, porque los dos han sido detenidos. A la esposa cuando el carro estaba avanzado la han querido lanzarla al piso, la han torturado a cambio de que ella hable, ahí en la FELCC los han torturado feo a los dos”, denunció la familiar a Erbol.

Salazar señaló que en la intervención policial realizada a la casa de su hermano, ubicado en la zona de Tacagua de la ciudad de La Paz, su padre también fue maltratado y torturado. 

“A su hija de seis meses la han dejado ahí. A mi papá que tiene 75 años igualito lo han torturado, le han apuntado en la boca con el arma, no sé qué corazón tienen esos uniformados para hacer eso y culparnos a nosotros”, lamentó.

Luego de los hechos, Piluy Sullca, dirigente de la comunidad Miraflores en Apolo, fue buscado por la policía como “el responsable de haber promovido una reacción armada contra los erradicadores de hoja de coca”. Fue capturado el 29 de enero en su casa de la ciudad de La Paz.

“Él estaba en La Paz (cuando lo detuvieron), hace ya dos años que había agarrado la casa donde los han detenido. Él estaba con su familia, con mi papá. Ahora con las torturas mi hermano tiene un dolor interno porque le han dado patadas, de todo le han hecho para que se inculpe”, dijo.

Policías destruyeron cultivos y bienes

Salazar contó que en Miraflores, donde viven unas 20 familias, los cultivos y bienes de los pobladores fueron destruidos por los efectivos policiales durante la intervención. “Ese día todos los hombres jóvenes fueron detenidos y sólo quedaron mujeres y niños”, dijo. 

“Las familias y los hijos están traumados, no hay quién los ayude, quién diga nada por ellos. Ahorita nosotros estamos pidiendo ayuda porque no saben qué van a comer, los niños han dejado de ir a la escuela, el año pasado no fueron y este año tampoco, no tienen plata. Pido a la población que nos ayude con víveres o ropa, porque las familias prácticamente no tienen nada. Qué van comer ellas, no hay vida en Miraflores, sus gallinas tenían pero entraron los policías y destrozaron todo, ya no hay nada, han destrozado lo que han querido, incluso han quemado documentos”, dijo.

Estafados por dos abogados

Salazar denunció que, en la desesperación de lo que pueda pasar con sus familiares detenidos, la población aceptó los servicios de dos abogados que se ofrecieron a defenderlos por un pago de 7.000 bolivianos por detenido. Dijo que esos abogados sólo empeoraron la situación de sus familiares. 

“Cuando estaban detenidos en Patacamaya contrataron a Benjamín Reynaldo P.C. con Edwin Rubén A.L. y nos sacó toda la plata. Incluso las familias se han prestado. Cada familia a dado alrededor de 7.000 bolivianos por detenido, se han prestado del banco de Apolo y de todos lados”, señaló.

El 19 de octubre de 2013, uniformados de Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) ingresaron en la comunidad de Miraflores, en Apolo, para erradicar coca. En el lugar se registró una acción violenta en la que fallecieron tres uniformados (dos militares y un policía) y un médico.

Se detuvo a 17 comunarios. En dos audiencias de cesación de detención preventiva fueron liberados nueve y ocho quedaron en prisión. En enero de este año, Édgar Piluy fue detenido.