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Organizaciones indígenas y campesinas de Guatemala realizaron el miércoles un paro nacional con manifestaciones en más de 20 carreteras del país, con el fin de exigir al Gobierno demandas sociales, entre ellas el cese a la persecución política y la nacionalización de la energía eléctrica.
El Comité de Desarrollo Campesino (Codeca) emitió una convocatoria en la que informó que también pedirán por la implementación de una política de repartición de tierra y demandarán el abastecimiento de medicinas para los hospitales.
Según Telesur, los campesinos exigieron además la asignación de unos 38 millones de dólares para un subsidio agrícola y una ley para regular los recursos naturales como el agua.
El portavoz presidencial Heinz Heimann, calificó la protesta como innecesaria porque —a su juicio— hay una apertura de diálogo para atender sus demandas.
Miembros de unas 80 organizaciones integrantes de la Asamblea Social y Popular de Guatemala realizaron desde el 11 de abril la Marcha por el Agua, la Madre Tierra, el Territorio y la Vida, en defensa de los recursos naturales de esa nación.
Los manifestantes reclaman la protección y el libre acceso al agua, derecho que ha sido violado por las empresas transnacionales en complicidad con el Gobierno del país centroamericano.
Estas movilizaciones se desarrollan en medio de la criminalización, persecución y judicialización contra líderes comunitarios y defensores de derechos humanos de los pueblos indígenas. (Granma Internacional)
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