Economia

Internacional
Los países deben utilizar todas las herramientas de política económica —monetarias, fiscales y estructurales— para mejorar sus perspectivas de crecimiento. El persistente estancamiento en las economías avanzadas podría estimular una actitud contraria al comercio y frenar el crecimiento
Economía
La creación de la empresa público/privada YPFB-Petroandina SAM deviene del acuerdo sobre Cooperación en el Sector Energético, suscrito el 23 de enero de 2006 (ratificado mediante Ley Nº 3430 de 21 de junio de 2006)
Economía
Adelantan que este sector aguardará el dato oficial sobre el segundo aguinaldo para la gestión 2016.

LA ECONOMÍA NO MIENTE…

Gary Antonio Rodríguez Álvarez

Para escribir esta columna pregunté por Facebook cuál de estos cuatro temas preferirían: Carta a Maricruz Ribera (la bella esposa del Alcalde de La Paz, defenestrada por una iniciativa de amor); Carta a María Galindo (graffitera incorregible, denostadora de la belleza); Alimentos orgánicos: ¿sabe Ud. lo que come? y “La economía no miente”. Pensaba que ganaría una de las dos primeras, pero una abrumadora mayoría pidió que escriba sobre lo último, lo que me llevó a confirmar que a la gente le puede entretener el bochinche, pero a la hora de ocuparse de un tema en serio, la preocupación generalizada es la economía.

Esto me llevó a recordar también que hace más de una década se hizo una encuesta en América Latina, preguntando a la gente si estaría dispuesta a renunciar a ciertos derechos y libertades (democracia vs. dictadura) si con ello mejorara su economía. Más del 60% respondió que sí… Triste y lacónica respuesta: ¿de qué sirve un modelo que no mejora su calidad de vida y no da seguridad a futuro?

La economía no miente, es una sentencia que -más allá de todo apasionamiento ideológico- es objetiva. Así titula un libro en el que su autor GuySorman defiende que "sólo hay una economía acertada: la que funciona". Para este economista, periodista, filósofo, profesor universitario y ensayista francés, con una veintena de libros exitosos, la economía que funciona no es aquella que triunfa por un breve tiempo bajo condiciones ideales, sino -con todos los defectos que se le endilgan- es mas bien la economía liberal, de mercado, la que impulsa el crecimiento en base a la competencia, con instituciones sólidas, al influjo de la libertad de comercio, una moneda estable, con innovación permanente, educación, emprendedurismo y un Estado del bienestar eficiente, que prevalece en el tiempo.

Sorman es un crítico de las economías donde “el Estado hace como que paga a los trabajadores y éstos hacen como que trabajan para el Estado", acabando en ineficiencia y corrupción, en función de un repaso sobre lo ocurrido en Argentina, Chile, Brasil, China, las dos Coreas, Japón, India y Taiwán, Rusia y el bloque del Este tras el desplome soviético, Turquía, Europa y EEUU, mostrando los fracasos y éxitos a la luz de los modelos económicos implementados.

¿Cabe negar que la economía no miente, cuando aún el cantautor cubano Silvio Rodríguez y el ex presidente Mujica se desenamoraron entre lo propuesto y logrado por el Socialismo del Siglo XXI del tristemente célebre Heinz DieterichSteffan?

 

 

Santa Cruz, 14 de septiembre de 2016

icono-noticia: 
Economía
No obstante, Arce destacó que la economía del país “va muy bien” en comparación a otros países de América Latina y Europa que viven actualmente una crisis en su economía. “Pese a esto Bolivia sigue creciendo y sigue existiendo buenos resultados”, afirmó.
Economía
El organismo estimó un 4,8% para 2015. En enero de 2016 calculó un 3,5% y hace unas pocas horas subió al 3,7%. El Gobierno prevé cerrar el año con un 5%.
Economía
“A las 15.00 ya estaban desbloqueadas todas las vías en el país, esa es la buena noticia. Ya han empezado a recorrer las flotas con los pasajeros, el transporte pesado ha empezado a operar, es la buena noticia ”, señaló el Ministro.
Economía
El sindicato plantea el pago de aportes a la APFs y la nulidad del Decreto 2699 del 9 de marzo de 2016, mediante el cual, diez inmuebles e Ecobol fueron transferidos a título oneroso al Ministerio de Hacienda.

MÁS ALLÁ DE UN ANÁLISIS DICOTÓMICO DEL CRECIMIENTO ECONÓMICO EN BOLIVIA

Juan Carlos Zuleta Calderón

En un artículo titulado “La paradoja del crecimiento económico con derrumbe productivo” publicado en agosto del año pasado, reiteré anteriores argumentaciones y planteé otras nuevas respecto a las bases del crecimiento económico para explicar posibles acciones futuras del gobierno (v.g. aumento de la inversión pública, financiada por deuda interna a través del BCB  o deuda externa onerosa, y   del gasto corriente, asegurando el pago del segundo aguinaldo) con el propósito de continuar incentivando la elevación de la demanda interna y mantener el incremento del PIB, aun a costa de llevar a la economía el 2016 hacia una situación caracterizada por una menor capacidad de creación de empleo y un estancamiento económico.

Dichas argumentaciones se pueden resumir de la siguiente manera: 1) El aumento de la demanda interna solo fue posible gracias al crecimiento de las exportaciones totales; 2) las exportaciones netas en 2014 disminuyeron no por la caída de las exportaciones sino por el incremento desmesurado de las importaciones no necesariamente de bienes de capital; 3) la demanda interna per se no puede ser el motor del crecimiento de un país con un mercado interno tan pequeño; 4) la producción nacional no tiene capacidad para abastecer la demanda interna; 5) la capacidad del gobierno para administrar las políticas monetaria y fiscal y mantener la estabilidad económica es sólo una condición necesaria (no suficiente) para el crecimiento económico sostenible; y 6) los avances en materia de industrialización con recursos del Tesoro y el BCB ni siquiera se pueden comparar con el franco proceso de desindustrialización exacerbado en años recientes por el modelo extractivista del gobierno.

En las últimas semanas, en su réplica a un reciente artículo del actual Viceministro del Tesoro y Crédito Público, un ex Presidente del Banco Central de Bolivia (BCB) ha puesto de relieve los puntos 1) y 6), tocando de paso mi observación respecto al financiamiento del gasto público con deuda externa. En esta contribución intentaré desarrollar un poco más los puntos 2) y 4), dejando para futuros aportes las argumentaciones contenidas en 3) y 5), a tiempo de plantear la necesidad de trasuntar lo que he venido en denominar el análisis dicotómico del crecimiento económico en Bolivia. 

Con relación al primer punto, quisiera en principio reiterarmi crítica al contrargumento usual del gobierno a cualquier oposición al rol de la demanda interna en el crecimiento económico: Si la demanda externa no podía haber influido en el crecimiento porque cayó no solo en 2014 sino también en 2015, entonces ¿qué determinó el incremento del PIB? Al respecto, en el artículo mencionado ya me he referido al papel ambiguo de la demanda externa en el crecimiento, no porque las exportaciones tengan un efecto marginal en el indicador macroeconómico sino debido a que en Bolivia las importaciones de bienes de capital, que podrían abrir las puertas a la innovación tecnológica y, por tanto, tener una incidencia mayor en el crecimiento, constituyen una parte muy pequeña (alrededor del 25%) de las importaciones totales del país. Como sostuve en mi artículo, hoy en día la clave del crecimiento es la innovación tecnológica, la que se efectiviza en general mediante la inversión en bienes de capital que, dada nuestra condición de país subdesarrollado, no podemos producir, por lo que para innovar necesitamos adquirir bienes de capital del extranjero.Adicionalmente, tal como anticipé en agosto del año pasado, la situación se complicó mucho más este año. En efecto, según datos del INE para el período enero-noviembre de 2015, la demanda externa se desplomó en un -118% respecto a similar período el 2014. En este contexto, las exportaciones cayeron (en -31,8%) 3,3 veces más que las importaciones (-9,5%), lo que sigue poniendo en cuestión el discurso gubernamental sobre el supuesto fomento al crecimiento en el mediano y largo plazos, considerando que en dicho período la variación porcentual negativa de las importaciones de bienes de capital (-12,7%) superó con creces la de las importaciones totales (-9,5%).

En torno al segundo punto, tengo a bien objetar otra vez la falacia de que la producción nacional es capaz de abastecer la demanda interna cuando está claro que para la mayor parte de los proyectos de inversión pública ejecutados por el gobierno lo que más se requiere son insumos (suministros), combustibles y medios de transporte (no bienes de capital) importados, cuyo aumento contribuye al deterioro de la balanza comercial, las exportaciones netas o la demanda externa. En este contexto,  las cifras en rojo en los primeros 11 meses del año pasado de las importaciones de bienes de capital y las importaciones totales mencionadas anteriormente contrastan con las únicas variaciones porcentuales positivas de las importaciones en el período considerado: Combustibles y Lubricantes básicos (8,0%), Vehículos Automotores de Pasajeros (7,5%), Artículos de Consumo Semiduraderos (8,5%) y Artículos de Consumo No Duraderos (1,9%).

Para concluir, por todas las puntualizaciones anteriores, sugiero al gobierno dejar de lado el análisis dicotómico (basado en una simple contabilidad del crecimiento) respecto del rol de los dos tipos de demanda (interna y externa)  en el incremento año a año del PIB para empezar a fijar más su atención en temas de fondo que permitan mejorar los niveles de productividad y competitividad en el país, tales como  la promoción de encadenamientos hacia atrás y hacia adelante en el ámbito productivo y el fomento de la ciencia y la tecnología a partir de una alianza estratégica entre gobierno (en sus niveles central, subnacional y local), empresarios (formales e informales) y universidades (públicas y privadas).   

* Una versión más larga de este artículo fue publicada en fecha 18/01/2016 en el sitio web Faroeconomics.org.

 

icono-noticia: 
Economía
Las bolsas asiáticas y el petróleo volvieron a caer este jueves, retroalimentando la fuerte volatilidad de las últimas semanas en las plazas mundiales.

Páginas