- 21404 lecturas
El problema del agua potable está golpeado duramente a muchos barrios de la ciudad de La Paz. Los vecinos de la zona Sur y de la ladera oeste de esta ciudad de repente son los más afectados con la falta del líquido elemento, pero el problema es de toda la ciudad.
Es un momento crítico, ni duda cabe, conseguir un poco de agua es todo un calvario, caminar con los baldes por aquí y por allá, o estar corriendo detrás de los camiones cisternas que distribuyen agua en diferentes zonas.
La ciudad es grande, a la escasez de agua, hay que sumar que el número camiones cisternas o aguateros es insuficiente, aunque se hagan los mayores esfuerzos, posiblemente sea bastante difícil cubrir la demanda de los vecinos paceños.
Muchas personas por agarrar un poco de agua no pueden ir ni a trabajar y hasta los colegios han tenido que acortar su calendario escolar.
Es un problema penosos y vergonzoso al parecer ocasionado por con administradores públicos incapaces que fueron a calentar los asientos de la empresa de aguas y solo esperar el fin de mes para cobrar su salario, sin hacer nada.
No en vano se están anunciando procesos investigativos y de juzgamiento para señalar con el dedo acusador, a quienes no cumplieron con su trabajo de servidores públicos, se espera que no solo sean palabras que se lleva el viento.
El momento es difícil, de repente no sea el tiempo para encontrar primero responsables de los hechos, ya que hay que priorizar el control de lo que se ha desatado, sin embargo no se puede evitar pensar en lanzar un ajo en contra de los sinvergüenzas que dejaron sin agua a la ciudad de La Paz.
Lo importante en este momento es manejar bien la crisis y tratar de que las necesidades de agua que tienen la gente sean medianamente cubiertas, sin ocasionarles tantas penurias.
Sacando lo bueno de lo malo, es que frente a muchas cosas negativas la solidaridad y la paciencia de los vecinos, en este penoso problema, al parecer sin pronta solución es encomiable, aunque naturalmente el descontento siempre vaya en aumento.
Parecen interesantes algunas respuestas inmediatas que se están dando, como ser la colocación de tanques fijos en diferentes sectores de la ciudad, al respecto no hay que descuidar el abastecimiento a estos depósitos de agua.
También es necesario que los camiones cisternas sean cuidadosamente seleccionados, aquellos que transportan combustibles no pueden llevar agua al mismo tiempo, este detalle es importante, pues los cisternas con el título; “Peligro Combustible”, no pueden ser aguateros al mismo tiempo.
El problema del agua potable es de todos, por el momento, el mal está hecho, ni vuelta que dar, lo recomendable seria mantener la calma, como dice un refrán; “Al mal tiempo buena cara” que más se puede hacer, ni dándoles de palmadas en las nalgas a los negligentes se va a lograr que las represas se llenen de agua.
Este es un problema social bastante serio, por lo cual tampoco, sería bueno que algunos políticos de un lado y del otro no estén pretendiendo sacar “ventajitas”, con este tema del agua potable, básicamente por respeto a la gente.
Se percibe que en este momento la gente quiere respuestas serias y concretas al problema del agua potable y no el show que guastan hacer algunos animales políticos que no desaprovechan la oportunidad para llevar “agüita” a su destartalado molino.
Las lluvias se retrasaron, afortunadamente ya están llegando, pero está muy claro que no se puede subordinar a las reservas de agua de una gran urbe como es La Paz, a la voluntad de los aguaceros, sería bueno ver y estudiar alternativas para el presente y para el futuro.
Se ve el gran sentido de organización y solidaridad de los vecinos paceños y quiérase o no, la respuesta rápida de las autoridades civiles y militares, locales y nacionales, ante una coyuntura donde no sirven para nada los discursos, las ideologías, tampoco los colores políticos, para calmar la sed.
Cuando la demanda general, marca el servicio que se le debe brindar a la gente, lo primero que hay que hacer es seguir actuando con rapidez y pensando en; “grandes soluciones, para grandes males”.
GRACIAS Y HASTA LA PROXIMA CUANDO VUELVA PARA HABLAR JUSTO Y CABAL
- 21404 lecturas