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El asesor técnico de la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (CIDOB), Lázaro Tacoó, señaló que no confían en que prosperen las investigaciones para dar con los responsables que ordenaron la represión a la Octava Marcha indígena en la localidad de Chaparina, el 25 de septiembre del 2011.
Tacoó señaló que las autoridades de gobierno buscarán lavarse las manos para que este caso quede en la impunidad y no se haga justicia a los más de 400 marchistas que se dirigían desde Trinidad a la ciudad de La Paz, exigiendo que no se construya una carretera en medio del corazón del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Secure (TIPNIS).
“Mientras estén en el Poder podrán decir todo y defenderse con todos los poderes que tienen (…) la comisión de fiscales que fue a Trinidad a tomar declaraciones a los hermanos queda marcado como un antecedente y ante la vuelta de un año electoral creemos nosotros que cambiarán la relación de fuerzas en el poder y ahí podremos dar con los responsables”, aseveró.
Según el representante de los pueblos indígenas, esperaran que en los comicios de 2014 cambie la relación de fuerzas políticas en la administración del país y sea reversible para el Movimiento al Socialismo (MAS).
“Ojala que los fiscales puedan ir avanzando en este sentido, aunque sabemos que no va a prosperar inmediatamente, sabemos que al estar los responsables protegidos por el gobierno nacional va ir de manera lenta, pero no perdemos la esperanza de que algún día se tiene que hacer justicia”, puntualizó, Tacoó.
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