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Por el momento el conflicto de la Caja Nacional de Salud ha bajado de intensidad, pero el problema en sí, no ha sido resuelto, esto significa que en cualquier momento la hoguera se puede volver a encender.
Mirar este problema solo desde lo que sucede en la Caja Nacional de Salud, no es de ninguna manera una buena perspectiva para obtener respuestas de un problema estructural que afecta no solo a un sector del área de la salud pública, sino más bien a una totalidad de la Seguridad Social en Bolivia.
Lo sucedido recientemente en la Caja Nacional de Salud, muestra que esta institución esta con diagnostico reservado en lo individual, pero en lo general es una expresión de que la seguridad social en Bolivia como tal está en una crisis profunda, lo que es igual a decir que los problema de la CNS son iguales en las demás entidades de la seguridad social.
Para muestra basta un botón dice el refrán, escuchar al universo de asegurados y las opiniones que ellos emiten, son coincidentes en; falta camas, no hay infraestructura, los medicamentos son escasos, corrupción, nepotismo y sin fin.
El problema aparentemente no pasa por la perspectiva medico científico, en el cual quiera se o no, se han hecho avances notables, la mayor parte de las observaciones están en los de atención al paciente, en el cual gran parte de participación tiene la burocracia y también la excesiva politización.
La seguridad social en Bolivia, parece necesitar una urgente operación que inicie un proceso de reestructuración de sus carcomidos cimientos.
La solución del gran problema no pasa, por un gerente o un director, pensar de esa manera es mentirse a uno mismo, el problema es más grande y delicado.
Por otra parte está visto que los principios con los cuales se maneja y las propias normativas de la seguridad social, ya no responden a la realidad, social y política que vive el país.
Entonces, es lógico comprobar que no hay dialogo por que las posiciones entre el pasado y el presente hablan lenguajes absolutamente distintos.
El pasado escrito en la historia tiene que sentar o construir las bases de las acciones del presente para permitir la proyección hacia el futuro, de otra manera el tiempo seguirá pasando y nada habrá cambiado.
Por ahora queda poco, quizás el principio más sólido como es la, solidaridad y mancomunidad de la seguridad social, que no debe perder y debe continuar sirviendo de base para edificar una nueva seguridad social en Bolivia.
Ahora se dice que se creara una entidad gubernamental que se encargara del diseño de las políticas nacionales de Seguridad Social y además posibilidad de afiliarse a cualquier sistema de seguridad social, como pasos iniciales que se van a dar en este campo, la intención puede ser buena ojala que en la realidad funcionen.
Por algo hay que comenzar, la salud pública, no debe tener colores políticos, la salud de las personas individual y colectivamente tampoco tiene fronteras, entonces la solución del problema está con la participación de todos, sumando lo que se pueda sin posibilidad de resta.
El ultimo problema de la Caja Nacional de Salud, ha mostrado una cruda realidad en la cual hay que actuar como dirían los buenos médicos; “Con emergencia por que la emergencia es emergencia” ya que la seguridad social está en grave crisis.
GRACIAS Y HASTA LA PROXIMA CUANDO VUELVA PARA HABLAR JUSTO Y CABAL.
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