Políticos reaccionan tras muerte del último dictador

El fallecimiento del expresidente de facto Luis García Meza Tejada generó diversas reacciones en el mundo de la política y cada cual evaluó el acontecimiento de acuerdo a su punto de vista político, histórico o coyuntural.

“La muerte de Luis García Meza, testimonia la memoria de un periodo terrible de nuestra historia que él encarnó con dureza y arbitrariedad sin límites”, escribió el expresidente Carlos Mesa donde colgó un video donde invita a recordar el golpe de 1980.

“El Estado hizo su tarea. Encarceló al que viola los DDHH. Contribuyeron  ciudadanos que buscaban justicia como Juan del Granado. Bolivia sigue hoy su lucha por la democracia y contra los gobernantes que no respetan el voto: mi compromiso es con esa lucha”, dice por su cuenta el líder de Unidad Nacional, Samuel Doria Medina.

Para el diputado opositor Tomas Monasterio “la justicia tarde o temprano le llega a los dictadores y asesinos. García Meza que fue el responsable de más de 500 muertos y tantas atrocidades a lo largo del país, no pudo conocer la justicia que se merecía en tierra pero estoy seguro que allá arriba Él no fallará”.

El docente universitario y excandidato a diputado Julio Alvarado, retuiteó “los crímenes de lesa humanidad no prescriben y Sacha Llorenti  tendrá que ser juzgado, así como Goni, Sánchez Berzaín y García Meza. La justicia tarda pero llega”.

El asambleísta departamental Edwin Herrera afirmó que la democracia del país está tranquila porque se hizo justicia con los principales protagonistas de la dictadura de los 80’ al ser juzgados, condenados, y cumplir penas de 30 años de cárcel sin derecho a Indulto para que estos hechos no se vuelvan a repetir en Bolivia.

Dijo que la condena fue un ejemplo para el resto del continente porque a partir del enjuiciamiento porque los actores del golpe militar fueron juzgados y condenados en un claro ejemplo al resto del continente.

Herrera lamentó que García Mesa haya fallecido sin revelar el lugar donde se encuentran los restos del líder socialista Marcelo Quiroga Santa Cruz.