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La Fiscalía de La Paz se apresta a cerrar la investigación sobre presunto uso indebido de influencias en el caso CAMC-Gabriela Zapata, encontrando responsabilidad en la exdirectora de la Unidad de Gestión Social, Cristina Choque, por haber prestado oficinas públicas para uso y beneficios personales.
El fiscal Edwin Blanco informó este jueves que de acuerdo a los testigos, hay uso de influencias y por tanto, el caso está cerrado hasta Cristina Choque, motivo por el cual se dispuso la detención preventiva en la cárcel de mujeres Obrajes en La Paz.
La autoridad sostuvo que tendrían que haber otros elementos para dirigir la investigación sobre presunto tráfico de influencia en el caso de la empresa china, donde la expareja del presidente Evo Morales, Gabriela Zapata, era jefe comercial.
Blanco manifestó que todo el trabajo de la comisión de fiscales es el fiel reflejo de la documentación obtenida, aclarando que la principal implicada y supuesta beneficiada, Gabriela Zapata, fue convocada a declarar en dos oportunidades.
Indicó que en las dos ocasiones Zapata se acogió al silencio sin aportar elementos de descargo. Sin embargo tanto la acusada como el abogado defensor, Eduardo León, se dedicaron a hacer una guerra mediática para generar dudas en la opinión pública, lamentó el fiscal.
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