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El Movimiento Al Socialismo (MAS) mantiene cautela ante el anuncio del Gobierno de un posible cobro de impuestos a los cocaleros. En tanto, el sector opositor asegura que de concretarse esta medida, se legalizará la coca ilegal que se produce en el Trópico de Cochabamba.
La presidenta de la Cámara de Diputados, Gabriela Montaño aseguró que el proyecto normativo aún no llegó a la Asamblea Legislativa Plurinacional.
“Todavía no se ha presentado de manera oficial a la Asamblea legislativa, se está trabajando con el Órgano Ejecutivo y las comisiones permanentes en la Cámara de Diputados”, señaló.
Por su lado, la jefa de bancada de Unidad Demócrata (UD), Jimena costa advirtió que el propósito del aparato estatal es legalizar la coca ilegal que se produce en la provincia del Chapare en Cochabamba.
“Este impuesto a los cocaleros tiene el fin de legalizar la producción que va al narcotráfico de la zona del Trópico de Cochabamba para decir son legales porque pagan impuestos y mientras tanto van a venderle al narcotráfico para hacer de Bolivia un país de tránsito de la cocaína de la región.
Solamente podrían pagar impuestos los cocaleros de los Yungas”, afirmó.
Asimismo, el vicepresidente de la Cámara Baja, Víctor Borda reconoció que parte de la hoja verde es desviada al narcotráfico. “Mantenemos el criterio de que la coca no es cocaína, sí, se desvía (al narcotráfico) pero necesita otros percusores para llegar a ser cocaína”, dijo.
Finalmente, el investigador, Franklin Alcaraz, explicó que no existen datos concretos sobre la cantidad de coca que se produce ni de los réditos que reciben los productores.
“ Con los métodos modernos de cultivo que se usan ahora, la producción ha aumentado sustantivamentem entonces los cálculos que se hacían ya no sirven, la única información que se tiene es del Gobierno y el Gobierno ha hecho su propio estudio", indicó.
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