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Raúl Alberto Morales es uno de los íconos del balompié nacional. Recordado por fungir como puntero derecho en filas de Mariscal Braum, Bolívar, selección nacional y su tan estimado Always Ready, club que le permitió lucir lo mejor de su repertorio. Hoy a días de celebrarse el centenario de la Asociación Paceña de Fútbol asegura que ésta institución “fue un trampolín para lograr el estrellato”.
“Teníamos muchas posibilidades de estar en los equipos más representativos de La Paz que entonces eran: Always Ready, Mariscal Braum, Ferroviario, Chaco Petrolero, Universitario, Municipal, 31 de Octubre, Strongest y Bolívar”, rememora el actual médico traumatólogo, quien considera que los pocos recursos económicos en las instituciones concedían más espacios para jugadores bolivianos en los 70.
Morales arrancó su carrera en Always Ready. El partido más decisivo lo jugó en filas del ése plantel, cuando le tocó vencer a Bolívar por 2 – 1. “Menos mal lo vio Mario Mercado y me contrató”, asegura recordando aquélla inolvidable tarde en la que su vida dio un giro copernicano.
Fueron tiempos en los que tuvo el gusto de compartir la cancha con futbolistas como: Griseldo Cobo, Abdul Aramayo y David Morales, quienes se encontraban en el ocaso de su carrera. También le tocó medir fuerzas con Ricardo Fontana y Oscar Melillo provenientes del San Lorenzo argentino.
Los azares del destino lo alejaron de The Strongest en su vida deportiva. “En ese tiempo estuve a punto de fichar por el Tigre, pero llegado el momento me dijeron que no y hoy digo menos mal, porque luego se produjo el accidente de Villoco (1969), donde fallecieron grandes amigos”, cuenta. Cabe recalcar que al terminar sus estudios ejerció durante una década como médico en filas atigradas.
Cómo olvidar las gambetas, velocidad y picardía de un jugador paceño que derrochó talento por doquier, siendo calificado como el “Garrincha boliviano”, es por eso que a días de celebrarse los 100 años de la AFLP, este singular personaje merece una mención especial para Erbol Digital.
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