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Marcelo Martins, delantero de la Selección Nacional, se preguntó durante la semana “¿ a qué vinimos a esta copa?” y su propia respuesta fue a mejorar lo hecho en las anteriores versiones del torneo internacional.
El día del debut en la Copa América contra México, las palabras más importantes del jugador resuenan en el ambiente nacional ya que agregó: “hay que intentar ganar el primer partido de cualquier forma”.
La misma idea parece tener ahora el entrenador Mauricio Soria, quien decidió cambiar de forma drástica su propuesta y su trabajo llevado a cabo durante la etapa de preparación: El conjunto nacional pasó de un sistema de 1-4-2-3-1, contra la Argentina, al 1-4-4-2 que propone esta jornada frente a México.
Más allá del cambio de sistema, también hay cambios en cuanto a jugadores con la presencia de Chumacero y Campos en el once titular.
Quiñónez estará en el arco; Hurtado, Raldes, Zenteno y Bejarano en la defensa; Veizaga, Danny Bejarano, Chumacero y Escobar en el medio terreno; Campos como media punta y Martins como único delantero.
Quedaron afuera Eguino, Morales y Lizio que fueron titulares contra los albicelestes.
Para Sergio Apaza, entrenador nacional, el cambio de actitud de parte de Soria tiene que ver con el temor de soportar otra derrota y por cifras contundentes. Para Víctor Barrientos, ahora entrenador de San José, los cambios no pueden ser traumático o del día para la noche ya que “demandan un tiempo de trabajo”.
Óscar Sanz, que también trabajará este año en San José, manifestó que Soria toma sus precauciones en relación con la idea inicial, porque entendió que los cambios no pueden darse de manera inmediata.
El partido se jugará en el estadio Sausalito de Viña del Mar a partir de las 19:30 horas en un ambiente en el cual los boliviano se hacen sentir, de acuerdo con los reportes que llegan de la ciudad chilena.
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