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La presidenta de la Asamblea Permanente de Derechos de Bolivia (APDHB), Yolanda Herrera, y el expresidente de la entidad, Waldo Albarracín, restaron importancia a la directiva paralela de Asamblea Permanente de Derechos Humanos de La Paz (APDHLP), integrada por algunos dirigentes afines al Movimiento Al Socialismo (MAS).
“Ya habíamos sido amenazados cuando tomaron nuestras oficinas, el 17 de enero, de que se iba a realizar como ha sucedido; entonces, entendemos que se ha llevado la actividad, pero está fuera del marco estatutario y orgánico de la institución”, afirmó Herrera.
En tanto, Albarracín, señaló que los activistas y las asambleas departamentales de derechos humanos reconocen la directiva presidida por Amparo Carvajal, electa de acuerdo al reglamento interno de la entidad.
“Por tanto, el evento trucho que se ha realizado este fin de semana no tiene ningún valor jurídico ni aval ciudadano porque es un grupo de militantes masistas que quieren hacer una asamblea progubernamental”, argumentó.
Un grupo de activistas y dirigentes de organizaciones sociales afines al gobierno de Evo Morales, el pasado fin de semana, designaron al minero Severino Estallani como presidente paralelo de la APDHLP, secundada por María Patiño, de la Federación de Trabajadoras Campesinas Bartolina Sisa.
Sin embargo, Amparo Carvajal, es la presidenta de la APDHLP, y también reconocida por la APDHB. La activista es cuestionada por algunos dirigentes afines al MAS por denunciar las muertes en Caranavi y la represión brutal a indígenas del TIPNIS.
Los dirigentes aliados del partido gubernamental, respaldados por la Policía Boliviana, dividieron las directivas de la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (CIDOB) y el Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu (Conamaq).
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