Evo denuncia ante ONU daño económico por paros chilenos

El presidente Evo Morales denunció este lunes ante la Conferencia sobre Océanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en Nueva York, el daño económico que sufre Bolivia a raíz de los permanentes paros de la aduana chilena, lo que interrumpe el libre tránsito comercial al que Chile está obligado a brindar al país.

Dijo que desde el año 2015 a la fecha, se tiene registrado un total de 8 paros en la frontera con Chile, que significa un total de 34 días que no circulaba la mercancía y más los últimos días de paro, significa una pérdida de 206 millones de dólares.

“Imagínense el daño económico a un país con 138 años de enclaustramiento”, manifestó en su intervención al remarcar que el acceso soberano a las costas del Pacífico, tiene relación con el crecimiento económico y el derecho del pueblo boliviano a un justo desarrollo.

Explicó que Bolivia es un país con los más altos costos de transporte de América Latina, según datos de la ALADI. El comercio boliviano debe asumir el costo adicional de 23.2% más por concepto de transporte que el resto de países de la región. Los costos para llegar a los puertos representan una barrera de comercio más perjudicial que los propios aranceles, indicó.

“Estos antecedentes demuestran el injusto enclaustramiento al que se somete a mi país. El libre tránsito comercial al que Chile está obligado a brindarnos, sufre constantes interrupciones por huelgas y paros de diversos motivos, pero sobre todo porque nuestro acceso, se ha convertido en negocio rentable para empresas privadas que se benefician del monopolio de los puertos”, manifestó.

Hizo votos para que la Conferencia convocada por la ONU en Nueva York, recuerde el compromiso asumido por varios países en la Convención de Viena de 2014 y en las reuniones subsiguientes, para reducir los tiempos de tránsito y facilitar el comercio internacional, en procura de superar la desigualdad entre ambos países.

Morales recordó que en 1825, Bolivia nació con más 400 kilómetros de costa fronteriza sobre el Océano Pacífico, pero con una invasión injusta, a fines del siglo XIX, desconoció la universalidad de los mares y la despojó del territorio costero, por una codicia sobre al guano y salitre que  enfrentó a países vecinos.

Explicó que desde entonces, Bolivia se ve privada del acceso al mar y acudió a la Corte Internacional de Justicia de La Haya, para que disponga que Chile esté obligado a negociar de buena fe y de manera efectiva con Bolivia, un acceso soberano al Océano Pacífico.