Género
Es una mentirosa, dice el presunto autor intelectual
Nora Quisberth: me arrastraron porque no quise renunciar

Lunes, 10 Marzo, 2014 - 17:36

Un grupo de gremialistas dirigido por Ramón Yujra Ticona, concejal suplente, y en complicidad del presidente del Concejo Municipal de Achacachi, Bernabé Gutiérrez, violentaron los derechos políticos de la concejala Nora Quisberth Ticona con el fin de hacer renunciar a su cargo en la provincia Omasuyps, departamento de La Paz, señaló la  denunciante.

Eran las 11.00, del pasado 10 de febrero, cuando Gutiérrez pidió a los asistentes de la sesión a apagar los teléfonos presumiblemente para evitar “interferencias” o conversaciones en el salón, pero el fin era impedir que la concejala Quisberth no pida auxilio.

Pasado unos minutos, llegó Yujra, junto a sus adherentes, a la sesión e inició la violencia en contra de la concejala Quisberth que se negó a renunciar a sus funciones, que el mismo provocó la furia de los adeptos del denunciado.

“Me tendieron al piso, intentaron ahorcarme con mi blusa en el cuello, me patearon, me arrastraron de un lado a otro. Me estiraron como al Tupac Katari (de los pies y las manos), hasta que perdí la conciencia”, relató.

La violencia verbal y física en contra de Quisberth duró al menos seis horas. Casi al final del hecho, agotada, con pocas ropas le hicieron firmar al menos 40 veces porque Gutiérrez insistía que no era su rúbrica.

“Me han puesto tinta en la mano y con huella digital se han hecho firmar los documentos. No podía defenderme (…) Yo ya estaba muy mal y he firmado (obligado el documento) de ‘licencia por fuerza mayor’”, recordó.

De acuerdo con los datos, las concejalas que estaban presentes en el acto de violencia no defendieron a la víctima, que estuvo aproximadamente seis horas humillada por su situación de mujer concejala.

“Mi suplente (Yujra), con Cristina Nogales me hizo pegar y arrastrar de los cabellos como a un perro y me han desvestido mis ropas. Mi (teléfono) celular, mi dinero, mi manta y sombrero se lo han llevado”, agregó.

El principal sospechoso, Yujra primo de la víctima, alegó en el hecho que tenían un “documento firmado” con Quisberth para que renuncie y luego él asuma la titularidad, pero dicho “compromiso” fue falsificado con el fin de echarla del cargo, según la denunciante.

Quisberth, que tiene 13 días de baja médica por la violencia, manifestó que en los próximos días retomará sus funciones para hacer prevalecer sus derechos de mujer concejala, y espera una audiencia con presidente Evo Morales para explicar la “tortura psicológica” de los suplentes y las organizaciones sociales.

El presunto “líder” de la violencia, Ramón Yujra, deslindó toda responsabilidad del hecho, dijo que no hubo ninguna renuncia sino que ella pidió licencia indefinida, pero que los gremialistas de Achacachi le piden que él asuma la titularidad.

“Esa señora es una mentirosa, acusa a medio mundo. Además, hubo un compromiso que hace rato debería dejar (su cargo) al suplente, a mi persona. No hubo ninguna presión”, argumentó.

Anarquía de concejales en Achacachi

Los concejales suplentes respaldados con sus adherentes de diferentes organizaciones sociales y campesinas a inicios del mes de enero, otros en diciembre, fueron destituyendo a sus titulares. Los casos son los siguientes:

El concejal del MPS, Américo Gutiérrez, fue sustituido por Elsa Quispe. Eloy Capcha, del MAS, fue reemplazado por su correligionaria Israelita Choque. Jesús Pilco, del Movimiento Sin Miedo (SMS), fue sucedido por Juana Quelca; y Toribio Huanca, del MPS, fue suplido por Cristina Quenta.

Según los datos que recogió Erbol Digital, todos los concejales titulares “fueron puestos contra la pared” y tuvieron “no más” que irse para que sus suplentes asuman el cargo, pero algunos que ahora son “titulares” cobran salario con irregularidades.

Las organizaciones campesinas y de otros gremios son los que mandan de “quién debe ser titular y suplente”, con el argumento de la frase de “gobernar obedeciendo al pueblo”, dicho por el Presidente Morales.

De acuerdo con otra fuente, los representantes y las organizaciones sociales en el municipio de Achacachi evalúan de quién pone la “coca” o “colabora” económicamente para sus reuniones, sino corren el riesgo de enfrentar como la concejala Quisberth.

Datos

Nora Quisberth Ticona es comerciante y fue electa con amplia mayoría de votos.

La víctima es soltera, sólo su hermana la defiende, situación que fue aprovechado presumiblemente por su suplente.

Ramón Yujra Ticona fue profesor del Colegio Omasuyos y estudiante de la Universidad Pública de El Alto (UPEA) en Achacachi.

La denuncia cursa en el Ministerio Público, Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV), Defensoría del Pueblo, Derechos Humanos y el Ministerio de Autonomías.

En 2013, 154 casos de violencia política fueron denunciados, todas están en impunidad.

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