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Los familiares de las víctimas de mujeres asesinadas, representantes de la Defensoría del Pueblo y la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (APDHB) pidieron hoy al gobierno de Evo Morales y los legisladores declarar alerta nacional para tomar acciones en contra de los feminicidios, que suman este año a 59, y desde el 2009 hasta la fecha 800 mujeres fueron ultimadas en el país.
Algunos papás, mamás, hermanos, hermanas y otros familiares de las mujeres asesinadas, de los años anteriores y casos recientes, con lágrimas en los ojos e impotencia imploraron este lunes al Gobierno y la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) a sensibilizarse y a tomar medidas para la materialización de la Ley 348 Integral para Garantizar a las Mujeres una Vida Libre de Violencia.
“Perdimos nuestros trabajos por buscar justicia”, “a veces ni lágrimas ya salen de los ojos”, “hay que tener plata para llegar a la justicia”, “la indolencia de las autoridades es impresionantes” y “ellas ahora que descansen en paz, nosotros aquí seguiremos movilizadas”, fueron las frases de algunos familiares de la mujeres asesinadas, que se movilizaron en la ciudad de La Paz.
El defensor Rolando Villena señaló que campea la impunidad y complicidad de jueces, fiscales y abogados frente a los casos; la incapacidad, inoperancia y desidia de las autoridades responsables de la aplicación de las normas; la connivencia de los sistemas educativos, la ciudadanía, los medios de comunicación, las instituciones cívicas, los partidos políticos y hasta las iglesias constituyen del “despiadado sistema patriarcal”, que parecen fortalecerse y reproducirse con más comodidad.
“El Estado no puede continuar indiferente ante las acciones violentas e incontrolables del poder patriarcal que se ensaña cada día contra los cuerpos y la vida de las mujeres, ya que de hacerlo, incurrirá en responsabilidad pública y violación de derechos por omisión y acción y aportará al crecimiento de esta pandemia social que, vulnera los derechos humanos fundamentales y acrecienta las grandes brechas de relaciones desiguales de poder entre mujeres y hombres”, subrayó.
Las activistas, la mayoría jóvenes, en la marcha no se ahorraron términos para pedir justicia. “Masistas y opositores fuera de la lista de candidatos; derechistas e izquierdistas respeten a las mujeres”, fueron los estribillos en la marcha protagonizada por al menos 1.000 personas, en la sede de Gobierno.
Mary Marca, del Centro de Información y Desarrollo de la Mujer (Cidem), señaló que los asesinatos de las mujeres subieron este año considerablemente, porque en 2013, de enero a junio, se registraron 40 feminicidios, pero en el mismo período de este año 59 mujeres fueron ultimadas.
“Se debe declarar la alerta a nivel nacional para parar la ola de feminicidios (con el fin de materializar) la Ley 348 porque (se registraron) 110 feminicidios, durante el primer año de la norma, pero no hubo justicia y todos (los casos) están en la impunidad; es decir, hay falta de voluntad política y la sociedad sigue en silencio”, afirmó.
La columna de familiares, representantes de la Defensoría y la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia inició de la plaza Mayor, luego se dirigieron por la Mariscal Santa Cruz para ir por el paseo del Prado, pero fue frenado por un grupo de jubilados que incluso intentaron agredir a las personas que pedían justicia por los feminicidios.
“Opositores no vengan a fregar nuestro bloqueo”, “vayan a marchar a donde sea, pero por aquí no pasarán”, “quiénes se han creído que están fregando al Gobierno”, fueron algunas frases, que con el rostro fruncido y los puños cerrados les amenazaron a los familiares de las víctimas y activistas.
En los ministerios de Justicia y Presidencia, sobre el pedido de declaratoria de “alerta nacional”, no se pronunciaron a pesar del intento de contactar con algunas autoridades de las dos carteras del Estado.
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