Sampaoli cambió las reglas a partir del caso Vidal

En el predio Juan Pinto Durán se advierte el ir y venir de gente. Entran y salen niños y mujeres. No hay desbordes ni autos lujosos. El caso Arturo Vidal bajó los decibeles. En su día libre, el seleccionado chileno se quedó en la concentración y los familiares pasaron el día con ellos. El pedido de Sergio Jadue, el presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), de terminar con las licencias para los jugadores parece haber sido captado por el entrenador Jorge Sampaoli. Además, circula por aquí que las solicitudes para acabar con las estridencias y el descontrol llegaron desde bien arriba...

Se conocía que algunas inconductas de los integrantes de la Roja generaban cierto malestar interno, pero el capitán, Claudio Bravo, tras la victoria por 5-0 sobre Bolivia, se encargó de alejar fantasmas para cerrar el escándalo que se desató tras el irresponsable acto de Arturo Vidal: "Es triste que se diga que hay divisiones en el plantel cuando no es verdad. Somos humanos, expuestos a errores. La vida es para eso, para aprender, para mejorar. Para poner los pies sobre la tierra y darnos cuenta de que somos personas comunes y corrientes", sostuvo el arquero.

La tensión sobre el caso Vidal se instaló especialmente con los medios de comunicación. El plantel local siente que fue tratado con crueldad y que todos sus integrantes quedaron salpicados por el desborde del volante de Juventus. Jorge Valdivia se mostró muy molesto porque se lo señaló como uno de los jugadores que habrían pedido a Sampaoli que Vidal no fuera separado del plantel tras el accidente que el mediocampista protagonizó con su Ferrari.

Por eso Valdivia, que además fue acusado de haber estado en el casino de Monticello, por donde había pasado Vidal, tuvo una actitud desafiante cuando afrontó los micrófonos: "Dijeron muchas cosas, por ejemplo, que estábamos remando hacia atrás. Es una irresponsabilidad tremenda de ustedes [por los periodistas].

Ya pagué por mis pecados, por las cosas malas que hice. No me metan más en problemas". Y continuó: "No tenemos injerencia en la determinación del entrenador. Se involucró a Gonzalo Jara, a Jean Beausejour y a mí. No hubo ninguna reunión con Sampaoli para decirle que tal o cual jugador debía quedarse en el plantel. La decisión fue tomada por el DT y respetada por los jugadores.

No hubo, por parte del entrenador, una reunión para preguntar si Arturo se quedaba o no. Nosotros agradecemos que Sampaoli haya tomado la decisión de dejar a Vidal. Creo que se actuó de una manera coherente y estoy respondiendo por la permanencia de él en el grupo. No estoy juzgando lo que hizo ni cómo estaba. Tampoco si está bien o mal. Estamos felices de que Arturo siga; insisto en que nadie opinó sobre la continuidad de Vidal. Ni Claudio [Bravo], ni Alexis [Sánchez], ni nadie", subrayó.

En el corazón del plantel, las opiniones son las más diversas, aunque existe una idea general de que Vidal recibirá su castigo en la justicia y, por eso, en lo deportivo debe mantener su posibilidad de disputar la Copa América. Sin embargo, se supo que en la ANFP ya se abrió un expediente sobre el caso. "El único autorizado para hablar del tema será Sergio Jadue", explicó Oscar Fuentes, el secretario ejecutivo.

No tenemos injerencia en la determinación del entrenador. Se involucró a Gonzalo Jara, a Jean Beausejour y a mí. No hubo ninguna reunión con Sampaoli para decirle que tal o cual jugador debía quedarse en el plantel. La decisión fue tomada por el DT y respetada por los jugadores

Los cuidados al seleccionado serán celosos. Jadue monitorea cada movimiento de los muchachos de Sampaoli y algunas versiones indican que el presidente recibió la sugerencia desde el Palacio de La Moneda de que no se dejara nada más librado al azar y que se eviten más escándalos.

Bravo, uno de los referentes del plantel, fue contundente en un mensaje consensuado: "El equipo está más unido que nunca, más mentalizado que nunca. Situaciones de vida como ésta son difíciles de encarar; lo bueno es que no pasó a mayores y no estamos lamentando vidas. Arturo se hizo responsable y pidió disculpas", manifestó el arquero de Barcelona.

Todo el plantel chileno parece haber entendido el mensaje que bajó casi como una orden: no más escándalos que generen más convulsión. Todo claro.