Evo instruye denunciar a Chile ante la FIFA por insultos

El presidente Evo Morales instruyó la mañana de este miércoles presentar denuncia formal contra Chile ante la Federación Internacional de Futbol  Asociado (FIFA) y la Conmebol por los insultos discriminatorios de hinchas chilenos contra la selección boliviana, durante el partido por las eliminatorias Rusia 2018, disputado anoche el estadio Monumental de Santiago.

El ministro de Trabajo, Gonzalo Trigoso, informó que en reunión de Gabinete, los ministros lamentaron las ofensas del público chileno en torno a la situación marítima de Bolivia, expresada en cánticos, gritos xenófobos y discriminatorios contra Bolivia.  

“Los ministros correspondientes tienen el encargo del Presidente de presentar la denuncia ante la FIFA,  Conmebol  y otras instancias internacionales de futbol, para que se sancione este tipo de acciones que no corresponden entre pueblos civilizados, pueblos vecinos, además que un evento deportivo no implica que se lleguen a estos extremos”, manifestó en declaraciones a Cadena A.

Horas más tarde, Morales en un discurso público en Cochabamba, dijo que el futbol "no puede ser discriminación ni ofensa. La ofensa y provocación a la selección boliviana de futbol, es una ofensa a la nación, a todos los bolivianos. Estoy seguro que tarde o temprano tiene que terminar ese mensaje de discriminación al pueblo boliviano en el futbol en especial. Ojalá nuestra Federación Boliviana de Futbol, la Conmebol o la FIFA y algunos expertos en futbol puedan tomar cartas en el asunto para que nunca más algun grupo de chilenos pueda ofender a países que van a visitar".

La sección deportiva del matutino La Tercera,  tituló en su edición digital que “Chile arriesga dura sanción por cánticos de hinchas”, luego describe que todo parecía indicar que el público había entendido el mensaje de no gritar consignas ofensivas contra Bolivia, razón por la cual Chile debió jugar en el Estadio Monumental y no en el Nacional.

Sin embargo, el respeto inicial al himno altiplánico fue sólo una ilusión de lo que vendría después. Con el correr de los minutos, buena parte de los 40 mil hinchas que llegó a Macul,  inició cánticos xenófobos (“Olé, olé, olé, olá, el que no salta no tiene mar”) y también gritos contra el arquero Carlos Lampe en cada ocasión que ejecutó un saque de meta. “Puto”, fue el epíteto favorito.

La situación obligó al locutor del estadio a advertir al público de esta conducta. Sin embargo, el mensaje no hizo efecto y los fanáticos continuaron con su conducta. Arturo Salah, presidente de la ANFP, se mostró muy incómodo y enojado por este episodio, que probablemente tendrá consecuencias, pues la Selección arriesga perder la localía en los próximos partidos eliminatorios.