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La policía detuvo a dos periodistas nacionales por intentar observar el entrenamiento de la selección boliviana. Jorge Asturizaga de La Razón y Baldo Ramallo de El Deber vivieron momentos incómodos cuando efectivos de la policía se acercaron, cuando ellos trataban de mirar por una rendija en una puerta de la curva norte del estadio Hernando Siles.
Los dos periodistas se identificaron con sus respectivas credenciales, en los cuál, los efectivos de la policía bajaron el tono de voz. Según se conoció de los propios uniformados fue que tenían órdenes para evitar que cualquier persona viera el entrenamiento porque fue un pedido del cuerpo técnico de la Verde.
Asturizaga y Ramallo fueron enviados a otro sector de estadio Hernando Siles, pero, sin darse cuenta la policía que facilitaron el trabajo de los dos periodistas, pues donde estaban se veía claramente el entrenamiento del elenco nacional.
Al final no pasó a mayores y ambos fueron liberados.
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