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Los agricultores afiliados en la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), expresaron que se encuentran en emergencia al no existir soluciones de fondo a los problemas que se está atravesando, y alertan al país en su conjunto que de no escuchar sus propuestas, podrá venirse una aguda crisis de insuficiencia de alimentos.
Con el fin de enfrentar esa situación, plantaron crear un Fondo de Reactivación Económica a través del Banco de Desarrollo Productivo y Banco Unión para inyectar capital operativo a los agricultores para la siguiente campaña de verano y reprogramar la cartera en mora del sector agropecuario con las industrias y los proveedores de insumos y maquinarias.
A la par debe procederse a la revisión de normativa que impide el acceso al crédito de parte de la banca regulada por la ASFI, a fin de que el título de propiedad sea un instrumento de garantía.
Piden también liberar la exportación del grano de soya para que los productores reciban un precio justo por su producción en las siguientes campañas agrícolas, relacionado con el precio de oportunidad de exportación y que permitirá facilitar la reactivación económica de los productores.
Igualmente iniciar el proceso de evaluación, aprobación u homologación de nuevos eventos biotecnológicos en los cultivos de soya y maíz, con el funcionamiento del Comité Nacional de Bioseguridad, para acceder a estas tecnologías que disminuirán la afectación de condiciones climáticas adversas y el ataque de plagas, como el Gusano Cogollero en maíz.
Los directores de Anapo que representan a los municipios de San Pedro, Cuatro Cañadas, Okinawa, Los Andes, El Puente y San Julián, solicitaron la presencia en Santa Cruz del Vicepresidente del Estado Alvaro García Linera y de los ministros de Gobierno y de Desarrollo Rural, para que de manera conjunta encuentren soluciones a la problemática planteada en el marco de lo propuesto por el sector agrícola y en la Cumbre Agropecuaria llevada a cabo el año pasado.
Caso contrario, reiteran que se avecina una dependencia absoluta de los países vecinos para proveer de alimentos básicos a nuestra población.
Esta posición está reflejada en un comunicado emitido por el sector oleaginoso en la prensa nacional, en el que se indica que en la actualidad se confronta la peor sequía de los últimos veinticinco años, con la afectación de más de 500 mil hectáreas sembradas con sorgo, maíz, trigo, chía y girasol, ocasionando una disminución en la producción de 540 mil toneladas de granos y una gran pérdida económica para todos los agricultores.
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