Social
Informe de la Defensoría del Pueblo
Hay padres que no permiten estudiar a muchachas afros


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Martes, 7 Abril, 2015 - 11:43

Un informe de la Defensoría del Pueblo señala que algunos padres en comunidades afrobolivianas no permiten que sus hijas vayan a la escuela, debido al desconocimiento que tienen sobre los derechos humanos.

“Según  el  pueblo  Afroboliviano, el  desconocimiento  de  sus  derechos  ocasiona  que  otras personas se aprovechen y los exploten laboralmente o que algunos padres no permitan que sus hijas  asistan a  la  escuela”, dice el informe.

El texto precisa que “en las comunidades  de  Los  Yungas  del  departamento  de  La  Paz  admiten no conocer a profundidad los derechos humanos, a  excepción de  las personas del  área urbana, que  sí  han recibido información y por ende tienen una percepción más completa sobre el tema”. Añade que “también  es  frecuente  que  se  confundan  los  derechos  con  las obligaciones,  por  ejemplo: derecho  a  lavar  los  platos,  derecho  a  respetar  a  nuestros  mayores,  a  cumplir  con  los encargos de las madres”.

El documento denominado “Estado de Situación sobre el Ejercicio de los Derechos Humanos del Pueblo Afroboliviano” es el resultado de un trabajo desarrollado por la Defensoría en poblaciones de las provincias Nor y Sud Yungas de La Paz y en las ciudades capitales de este departamento, de Cochabamba y de Santa Cruz.

Para el defensor Rolando Villena, “la discriminación, la exclusión, la violencia y agresión por parte del Estado y la sociedad en su conjunto, es aún más grave en el caso de las mujeres afrobolivianas que están sometidas a múltiples formas de discriminación por su sexo, el color de su piel, educación y pobreza”.

De acuerdo a una nota de prensa de la Defensoría, las niñas y las adolescentes deben ayudar en la casa e incluso abandonar la escuela a favor de sus hermanos varones, quienes consideran que estas actividades domésticas son simples en comparación al trabajo que ellos realizan en el campo.

“Estas mujeres afirman sufrir discriminación y malos tratos, señalan que son las mismas mujeres quienes ejercen violencia, las suegras y las cuñadas son las principales”, agrega el informe.
 
Asimismo, la participación de las mujeres afro en reuniones y toma de decisiones de su comunidad es limitada, peor aún cuando proviene de otra comunidad.

En cuanto a la discriminación contra mujeres afro en la ciudad, una de las entrevistadas en la investigación relató: “uno de los actos más fuertes de racismo y discriminación que he sentido, ha sido en el año 99 cuando postulé a la UMSA, el  rector de pedagogía me dice que yo no debía postular porque  los negros no sirven para estudiar, no hace mucho  tiempo entre doce o trece años atrás. Y yo le dije…….. Le voy a demostrar que los afros si podemos  y  finalmente  no me  dejó  entrar  a  esa  carrera  y me  fui  a  otra  carrera. Creo  que  ese  fue  un  acto muy  visible  de  discriminación  y  de  tema  de  derechos, creo que yo me sentía con suficiente capacidad para hacer un buen examen o un buen trabajo”

A nivel general, la investigación señala que los avances normativos no han sido suficientes para erradicar las prácticas racistas y discriminatorias que sufren las y los afrobolivianos, no sólo en las zonas urbanas, sino también en sus propias comunidades donde las mujeres, las niñas, las adolescentes y las personas con discapacidad son las que sufren los mayores niveles de violencia, marginamiento y maltrato social.

“Las prácticas discriminatorias generan también pérdida de su identidad y complejos de inferioridad en el inconsciente colectivo del pueblo afroboliviano, afectando de igual forma en la inserción en las dinámicas citadinas, ya que cuando migran se enfrentan a marginaciones que afectan a su inserción laboral y el acceso a la educación e incluso el color de la piel los criminaliza”, se lee en el informe defensorial.

El informe completo se puede ller aquí: http://www.defensoria.gob.bo/archivos/Informe%20AFROS.pdf

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