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Los jugadores del Club Bolívar retornaron este lunes a los entrenamientos con cara de circunstancia, después de la derrota sufrida frente a Oriente Petrolero que los distancia seis puntos del plantel refinero.
Solo algunos de los integrantes de la Academia, como el caso de Wálter Flores, ofrecieron declaraciones al periodismo local, oportunidad que sirvió para dejar en claro que esperan una caída de Oriente para emparejar la tabla.
Aunque con un partido menos que el plantel dirigido por Eduardo Villegas, Bolívar espera volver a ser puntero dentro de dos fechas, esperando un tropiezo de los orientales. “Fuimos superiores en todo el partido y un penal lo desequilibró todo”, remarcó Flores, para quien no hay tiempo de lamentaciones.
Un lastimado Erwin Saavedra pasó rápidamente del bus a la cancha, sin hacer referencia al duro momento sufrido ayer tras el codazo propinado por Bejarano, que algunos de sus compañeros calificaron como artero, cobarde y de mala persona.
Más pensativo que nunca, Xabier Azkargorta comandó la tarea de esta mañana, que tuvo como actores a quienes no jugaron el encuentro, mientras el conjunto titular trabajó en una sesión de recuperación en el orden físico.
Algunos dirigentes de la institución mencionaron que ahora el torneo se hace cuesta arriba y esperan que la distancia no se haga más larga en relación con Oriente Petrolero.
Sin embargo, aseguraron que nada está dicho aún y que resta un buen trecho de campeonato para el final. Bolívar enfrentará a Sport Boys este miércoles en la ciudad de La Paz, cotejo que se cumplirá a partir de las 20:00 horas, encuentro en el cual no podrá contar con Capdevila y Saavedra, por acumulación de tarjetas amarillas; Gutiérrez y Callejón por expulsión.
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