ELECCIONES 2014

Política
Cada uno de los 34 mil productores de coca de los Yungas de La Paz aportará a dos libras de la hoja verde para la campaña del Movimiento Al Socialismo (MAS), informó a ERBOL el presidente del Consejo de Federaciones Campesinas Yungueñas (Cofecay), Reynaldo Calcina.

LOS PERFILES DE LAS ELECCIONES

Victor Hugo Maidana Alcoba

Se acerca la fecha de las elecciones, faltan menos de tres meses y quienes aspiran al poder, intensifican sus dinámicas proselitistas.

Se nota que los candidatos están trabajando fuerte en la construcción de las  imágenes con los cuales pretenden cautivar a multitudes y pedirles  que su voto en las urnas electorales sea para uno de ellos.

Desde luego que no es nada raro que esto pase, ya que las elecciones tienen una especie de magia, con la cual muchos candidatos se transforman, hacen de todo y se valen de todo para sumar votos.

Todo  proceso electoral, ya sea nacional, departamental o municipal, antes y ahora, siempre trae consigo alguna novedad en cuanto a la imagen de los candidatos se refiere, por que como las cosas entran primero por los ojos, es muy importante como se vean los candidatos o mejor dicho como se muestran.

Las elecciones tiene un toque casi mágico se podría decir, muchos candidatos se convierten en buenos a malos y de malos a buenos en menos de lo que se puede pensar, lo importante es construir la imagen de un personaje que aparente ser el mejor que el otro.

Recordemos  que en las pasadas campañas electorales las imágenes  de boga, eran a su turno el de los intelectuales, los patriotas, los altamente técnicos, los gerentes, etc. etc.

Se percibe en el ambiente que el modelo de la imagen electoral nacional 2014,  es la del candidato, bondadoso,  comprensible,   sensible y sencillo. La apariencia del “piadoso”,   entro  de moda en esta temporada.

Este nuevo modelo de estampa electoral se caracterteriza por hacer aparecer al candidato,  como el ángel sin alas, el perdonador, aquel personaje que cae bien a todos con su simpatía.

En este marco, el  nuevo modelo del retrato electoral de paquete, es de aquel que viene de abajo,  triunfador; bromista, bonachón, no  importa si hace y dice, “opa chistes”, la cosa es que el auditorio sonría y le aplauda aunque no le entienda lo que dice.

Poco importa si por hacerse el popular tiene que hacer ridículos tocando los platillos de alguna banda musical que interpreta ritmos  musicales de morenadas, cullahuadas,  diabladas, llameradas y otros o hablar un lenguaje nativo con tono extranjero.

La presentación del candidato buenito y perdonador, es de  aquel  que parece que espera a todos con los brazos abiertos, a los “pecadores y arrepentidos”,  para que vayan a él y caminen con él.  Como diciendo, ¡Dejen que todos vengan a mí!, yo soy  la verdad,  el camino y la única alternativa política”.

Esta imagen electoral no es incompatible con ritmos musicales pegajosos, algunos utilizan canciones con mensajes para que “todos se agarren de las manitos” para citar un ejemplo.

También se puede advertir una particularidad de este  nuevo modelo de imagen del “candidato buenito y perdonador”, es que habla bastante de Dios; Eso  está bien, porque Dios está en todas partes y en todo lugar. Pero es bueno aclarar que “no todo el que dice Dios, Dios, entrara al reino de los cielos”. En este caso probablemente sería mejor decir que no; “todo el que dice Dios, Dios, entrara al palacio de gobierno para sentarse a la derecha de los padres de la patria.

Al respecto de lo que si podemos estar  bien seguros es que; si bien Dios es absolutamente compatible con todos los modelos de imagen de los candidatos,  porque los acepta tal como son en su infinita bondad,  no aceptaría ser Jefe de campaña electoral de nadie en particular.

El modelo de “La imagen del buenito y perdonador”, no tiene autoría, es de publicista anónimo, pero habría que felicitarlo, porque su propuesta tiene éxito, está siendo  utilizada por los de esta vereda y también por los del frente.  Como es lógico para unos tiene mejor resultado que para otros. Por lo menos así se ve.

Pese a todo lo visto se puede advertir también que  no falta quien mantiene el modelo clásico de la figura del candidato,  estricto, con el ceño fruncido y firme en sus decisiones, que no ha perdido vigencia, se lo  sigue utilizando, no está mal  porque según dicen, construir la imagen electoral con este modelo es un poco difícil, tiene un cierto aire autentico, ya que mucho depende  del carácter del candidato.

Se vemos que son cinco los partidos políticos que compiten en estas elecciones 2014, podríamos decir que tres de sus candidatos están utilizando el nuevo modelo de imagen, uno el clásico y otro que no utiliza ni el uno ni el otro, no se sabe, porque sencillamente no se lo ve, ni se lo escucha hablar.

Aquí se ven las caras y las caretas de las elecciones,  estos elementos dichos de una manera comunicacional pueden ayudar a tomar decisiones en la hora del voto, diferenciando si se elige con la razón, la emoción, mirando los perfiles de las elecciones.

GRACIAS, VOLVERE  PRONTO PARA HABLAR JUSTO Y CABAL.  

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Indígenas
La CIDOB quedó divida en 2012. Actualmente cuenta con dos cabezas; una presidida por Adolfo Chávez y la otra es dirigida por Melva Hurtado, aliada del Primer Mandatario. La misma situación se repite en el Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu (CONAMAQ).
Política
El candidato a la vicepresidencia Ernesto Suárez aseguró que la “década de oro” –que el país vive actualmente, según el vicepresidente Álvaro García Linera– sólo es real para el segundo mandatario del Estado Plurinacional y su familia.

CUANDO EL SILENCIO SUSTITUYE AL ESTUPOR

Jenny Ybarnegaray Ortiz

Un largo silencio me acompaña,  hace más de dos meses he dejado de publicar en mi columna "A quien corresponda" en ERBOL Digital (y otros medios, como BOLPRESS y ALAI-AMLATINA, que tienen la gentileza de reproducir mis invocaciones) y no es que no tenga algo que decir, es que es más grande el horror y el espanto que me acompañan que las letras que puedan enunciarlo.

Pongo mi mirada en el mundo, y me horrorizan las noticias cotidianas que nos muestran cómo y cuánto sangra Gaza y que, además,  han opacado las de tantos otros lugares donde se producen guerras horrorosas, donde los muertos se cuentan por cientos, por miles, como si cada una de esas vidas –por sí misma– no valiese siquiera ese número en la estadística. Guerras sin fin, sin motivo (o con motivos aparentes), sin nada que ganar y todo por perder. Las fotografías de MIS niños y MIS niñas de Gaza –sí, porque aunque suene presuntuosa, son tan míos como del mundo que los pierde– me provocan tan hondo pesar, que me dejan sin palabras. Ya no basta maldecir a quienes provocan tanto horror, ya no basta protestar contra todos los poderes del mundo que no hacen algo efectivo para ponerle fin a tanto espanto, ninguna explicación alcanza cuando lo que están haciendo es provocar un genocidio sin límites y que de seguro tendrá secuelas de odio por muchas generaciones más, de las descendencias de quienes quedarán con vida para contarlo.

Si coloco mi mirada en mi país y en la “coyuntura”, veo que ahora más que nunca está enriesgo la democracia, esa entelequia por la que nuestra generación peleó contra las dictaduras militares. Lo percibo toda vez que escucho a la gente de mi entorno decir “cuídate”, “cállate”, “mira para otro lado”, “no te pongas en evidencia”… Cuando esto sucede, es señal de que “el huevo de la serpiente” está madurando en el inconsciente colectivo, y es entonces cuando la democracia está en verdadero riesgo, porque no puede haber democracia sin un cuerpo social vital que tenga la capacidad de enfrentarse a los poderes abusivos, a la soberbia de los poderosos, al cinismo de quienes se saben y creen ganadores por anticipado; tan ganadores, que ya ni las formas cuidan, que andan por todas partes pateando todo cuanto les incomoda y les hace frente, porque creen que nada podremos contra ellos.

Veo cómo se alistan las fuerzas políticas para lidiar en las próximas elecciones generales de octubre, y no puedo menos que sentir/saber que no tenemos motivos para ilusionarnos. Del lado del “oficialismo” vemos con impotencia cómo derrocha discurso y dinero DEL ESTADO para continuar con su campaña destinada a “encantar” al pueblo que todavía cree en él, tan encantador discurso emite que todavía se escuchan voces de intelectuales que respeto, que desde afuera o desde adentro del “proceso” abogan por un “apoyo crítico” a algo que ya tiene el olor de los cadáveres insepultos. Mientras que, del lado de las oposiciones, veo cómo se colocan en posición de perdedores anticipados, sin más para ofrecer que un juego de luces para evitar que se vuelva a consumar el temido “dos tercios” con el que la camarilla que se apropió del “proceso de cambio” y que con ello logró arrasar con cualquier vestigio de “estado de derecho” en estos cinco años, logre mantenerse ahí con ese poder sin límites.

La derecha más recalcitrante, representada por Tuto Quiroga, presenta una lista de candidatos sacados del parque jurásico, algunos neo-nazis incluidos, de esos que se creen que su blanquitud los hace más dignos del poder que cualquier otro que habite este territorio. Los unitarios demócratas, al lado de Samuel Doria Medina, nos ofrecen una coalición donde todo cabe, con un discurso que sólo convoca a una opción por el “menos malo”. Los “sin miedo”, con Juan Del Granado a la cabeza, que tenían la oportunidad de convertirse en una opción de oposición con firmeza, estuvieron perdiendo mucho tiempo en el intento de una política de alianzas “todo vale”,  y al final sacaron de la manga a una chiquilla caprichosa como figura “juvenil” de acompañante ¿para atraer el voto “oriental” que ya tiene destino claro después de la configuración de las fuerzas políticas antedichas?, con lo que perdieron la confianza de mucha gente que había puesto alguna expectativa en esa candidatura. Al final de la cola están los “verdes”, con Fernando Vargas al frente, una opción sin pretensiones ganadoras –tanto así que no lograron siquiera completar la plancha de 168 candidatos/as, incluidas las candidaturas para presidente y vicepresidente– pero que al menos plantea un discurso orientado a reconducir el malhadado “proceso de cambio” por los cauces por donde se fundó.

Y, como yapa, tenemos “listas equitativas” con “paridad” y “alternancia”, 50% hombres y 50% mujeres, como si la presencia de una proporción igual de mujeres y hombres en las mismas, nos ofreciese alguna garantía de algo a nuestro beneficio (como mujeres, digo), cuando ya hemos visto con demasiada paciencia y claridad meridiana, que esa presencia no representa ni más ni menos que el ejercicio de un derecho de ciudadanía para las mujeres quienes, después de todo, tampoco se sienten “obligadas” a representarse ni a representarnos en nuestras vindicaciones de género.

Finalmente, miro en mi entorno más próximo, en el que tengo comprometida mi militancia y mi quehacer más persistentes,y veo los cotidianos actos de violencia en contra de las mujeres de mi país (y del mundo), tan cotidianos que ya ni hacen mella en el corazón de la gente, porque suman y siguen sin que nada logre detenerlos, y esa rabia habitualque clava espinas en mi cerebro y e mi corazón con cada una de ellas. Frente a esto, ninguna de las ofertas políticas electorales antes mencionadas siquiera las nombra, salvo en las costuras, como para decir algo que nada dice, porque la violencia en contra de las mujeres “no es un tema electoral”.

Viendo y poniendo todo esto en perspectiva: los horrores de las “guerras” que en el mundo provocan tantodolor y destrucción, las opciones que se nos plantean ante las próximas elecciones generales en Bolivia, y la violencia en contra de las mujeres, quizás alguien se preguntará por la coherencia de este artículo. Permítanme responderles de este modo: creo que los tres asuntos tienen interconexiones invisibles, pero al mismo tiempo muy fuertes, y es que todas se refieren a nuestras oportunidades hacia el futuro.

Primera pregunta: en un mundo desgarrado por el horror de las guerras ¿a quién puede importarle nuestra endeble democracia si resultare derrotada?

Segunda pregunta: en un país donde la oferta política se reduce del peor al “menos malo” ¿qué nos promete el futuro inmediato si no “más de lo mismo”, cuando mucho, si no es peor?

Tercera y última pregunta: ¿qué opciones tenemos las (y los) feministas frente a este panorama tan desalentador? Por lo visto, no muchas, salvo el continuar bregando a favor de las causas que consideramos justas, con una proyección de mediano y largo plazo que promueva la paz, la democracia y la libertad como los valores imperecederos que nos constituyen como “sujeto político”.

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Política
El candidato de Unidad Demócrata (UD), Jaime Navarro, informó que solicitaron al canal estatal “Bolivia TV” transmitir el acto de presentación de sus candidatos en una provincia del departamento de Santa Cruz.
Política
Unidad Demócrata (UD), el Movimiento Sin Miedo (MSM), Partido Verde de Bolivia (PVB) y el Partido Demócrata Cristiano (PDC) expresaron su desconfianza con el trabajo que realizan las autoridades del Tribunal Supremo Electoral (TSE).
Política
El director del Servicio Intercultural de Fortalecimiento Democrático (Sifde), Juan Carlos Pinto, dijo que algunos candidatos incurren en la “propagandización” de la entrega de obras visualizando a los postulantes a las elecciones generales.
Política
“El Presidente Evo Morales tiene todo el derecho, y no solamente el derecho, sino también el deber de utilizar toda la logística para preservar su seguridad”, afirmó la Ministra en conferencia de prensa.

Por el MAS: Sonia Brito compite por la 8 de la ciudad de La Paz

 
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La circunscripción 8, antes 10, le dio vida al liderazgo regional de Juan del Granado. El 12 de octubre, los electores de esta zona de la ciudad de La Paz tendrán que escoger por primera vez entre el MAS y el MSM. Sonia Brito confía poder ganar con la papeleta azul. Fue viceministra de Defensa de los Derechos del Consumidor. Antes estuvo peleando por los derechos de los pueblos indígenas de tierras bajas. Con ella hablamos también del TIPNIS.

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