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El padre Mateo Bautista, que trabaja en favor de los niños con cáncer del Hospital Oncológico de Santa Cruz, se sumó a la lista de los sacerdotes que reaccionaron indignados por la negativa del gobierno de ayudar a la Iglesia Católica en el pago del doble aguinaldo a los funcionarios de sus obras sociales.
Bautista dijo que las instituciones que atienden a sectores necesitados, como los niños con parálisis cerebral y cáncer, sobreviven gracias al apoyo económico extranjero, porque el Estado no les otorga ni siquiera los ítems para los empleados de dichos centros y en el caso de Santa Cruz, la Gobernación sólo entrega 10 bolivianos por día.
“Por eso, muchas de estas instituciones subsisten gracias a la ayuda de países extranjeros, por lo cual, nos tendría que dar vergüenza a los bolivianos que otros países como España atiendan y apoyen a niños con parálisis cerebral, nos tendría que dar vergüenza que la quimioterapia que se da a nuestros niños con cáncer en el Hospital Oncológico venga también de las Islas Baleares”, aseveró.
Afirmó que hay una necesidad inmensa de ayuda a las obras sociales, porque las mismas es casi imposible que subsistan sin la ayuda extranjera, pese a que las autoridades aseguran que el país goza de un buen estado económico.
“Si a esa deficiencia se añade un segundo aguinaldo, es de sentido común (que no se puede cubrir dicha disposición), es como pensar que el ministro de Trabajo (Daniel Santalla) pudiera dar educación, casa y cuidados a su hijo con 10 bolivianos y más aún si ese niño pudiera tener paralítico cerebral”, manifestó.
El Gobierno ratificó en los últimos días que no apoyará con el pago del doble aguinaldo a los funcionarios de las obras sociales. Incluso, el pasado 14 de noviembre, el presidente de la Cámara de Diputados, Marcelo Elio, exigió a la Iglesia Católica que todos los obispos en territorio nacional sean bolivianos y aseveró que los extranjeros que ocupan estos cargos tienen “criterios absurdos”.
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