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El Instituto Boliviano de Ciencia y Tecnología Nuclear (IBTEN) puede almacenar a las 416 fuentes radiactivas en desuso, que tiene en sus instalaciones de Viacha, por cinco meses más, según el director del Centro de Protección y Seguridad Radiológica (CPSR), Alberto Miranda.
El funcionario precisó que el IBTEN tiene la capacidad de guardar este material radiactivo hasta seis meses. La responsable de la seguridad del CPSR, Lola Aguilar, informó que las fuentes se encuentran en su actual depósito desde los primeros días de diciembre del 2013, es decir hace un mes.
“Puede ser que lo tengamos (el material) tres meses (o) seis meses; pero ya comenzar a excederse, es decir, que se convierta en un (almacén) cuasi-definitivo, eso ya no es aceptable. Las condiciones (del depósito) son adecuadas pero no reúnen las condiciones para convertirse en un almacén definitivo”, dijo Miranda en entrevista con la Red ERBOL.
Dos informes del Ministerio de Educación afirman que la mayoría de estas fuentes radiactivas se encuentra en un laboratorio, construido para el Centro de Investigaciones y Aplicaciones Nucleares (CIAN), acondicionado para ser un almacén temporal.
El Director del CPSR detalló que lo depositado en la población paceña “es material radiactivo sólido que está en contenedores de plomo”. Añadió que “el objetivo final es que Viacha no se convierta en un depósito de fuentes (radiactivas)”. La intención es sacar del país este tóxico exportándolo a Estados Unidos.
El Ministerio elaboró un proyecto de Decreto Supremo que exime a la exportación de este tóxico de requisitos aduaneros, puesto que no todo el material tiene sus documentos de ingreso al país.
Los peligros
MIranda indicó que el material radiactivo puede causar cáncer a las personas expuestas su irradiación. Además, como se ha visto en accidentes de tipo radiológico, ocasiona muerte de células. “Aparecen un tipo de quemaduras”, acotó.
Si bien hizo hincapié en que la seguridad está garantizada en las afueras del CIAN, Miranda recomendó a la población de Viacha que esté “lo más lejos posible” de las instalaciones científicas.
Desecho radiactivo estuvo en un pozo de hospital de Cochabamba
Parte de las fuentes radiactivas contienen el elemento Radio-226 que se utilizaba en tratamientos de cáncer. Éstas estuvieron al interior de un pozo de concreto en el Hospital Obrero No. 2 de Cochabamba desde el año 1992 hasta hace unos meses, según el funcionario del IBTEN.
De acuerdo a los informes del Ministerio de Educación, la manipulación de estas fuentes ocasionó que la radiactividad haya escapado de su contenedor, sin embargo, el Director del CPSR aseguró que se hicieron las mediciones respectivas en el hospital y no se encontró niveles de radiación peligrosos.
Los documentos dicen que hay 140 fuentes contenedoras del Radio-226 y que ahora se encuentran almacenadas en un ambiente aparte del laboratorio en que se encuentra el material restante.
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