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Millonarios que se dan gustos faraónicos hay muchos y los gastos que hacen pueden llegar a resultar impresionantes, pero el caso del fallecido narcotraficante Pablo Escobar es uno de los más impactantes de los que se tenga registro.
Escobar no sólo ganaba dinero a manos llenas, sino que lo gasta en paralelo con una serie de gustos que impresionan incluso a las personas más adineradas.
Según se publicó en Guioteca, en el apogeo del negocio internacional ilícito que montó gracias al narcotráfico, Pablo Escobar llegó a ganar 420 millones de dólares por semana. Teniendo en cuenta los anterior, se estima que llegó a acumular una fortuna cercana a los 15 mil millones de dólares. De hecho, estuvo 7 años seguidos dentro del ranking de la revista Forbes que incluye a los hombres más ricos del mundo.
Su riqueza era a costo de actividades ilegales, extorsión, narcotráfico y muerte de miles de personas durante el periodo que lo enfrentó con sus enemigos en el mundo del delito y también con el propio Estado colombiano.
Estas son algunas de las excentricidades y gastos millonarios con los que Pablo Escobar ostentaba su riqueza:
1.- Hacienda con lujos extravagantes: De acuerdo a lo publicado en el canal Los 90 de Guioteca, en la Hacienda Nápoles, ubicada en la localidad colombiana de Puerto Triunfo, provincia de Antioquía, construyó un zoológico privado con hipopótamos, cebras, pumas, jirafas, elefantes y otros animales. En el lugar, donde llegó a tener más de 1.500 especies, organizaba grandes fiestas, cuyos invitados aprovechaban la ocasión para conocer a estos animales. En señal de opulencia, en el ingreso a la hacienda mandó instalar un pórtico con una avioneta, la cual se mantiene hasta hoy día, puesto que el lugar se convirtió en un parque de atracciones turísticas.
2.- Servicios diarios de belleza para su esposa: Victoria Eugenia Henao Vallejo era la esposa de Pablo Escobar y su relación venía desde un romance de juventud. Cuando el negocio del narcotráfico le aportaba recursos ilimitados a la familia, ella recibía cuidados especiales de belleza a diario, tales como maquillaje, peluquería y manicure.
Pablo Escobar junto a su esposa e hijos
3.- Servicio doméstico: Todas las mujeres que trabajaban en el servicio doméstico de la hacienda Nápoles de Escobar tenían regalías que no todo el personal de estas características tiene. Por ejemplo, la ropa de servicio era especialmente diseñada para ellas. Además, en línea con su jefa, la esposa de Escobar, recibían cuidados especiales de peluquería y maquillaje.
4.- El edificio de Medellín: Por razones de seguridad, Escobar compró un edificio entero para él, su familia y el personal que los atendía. El pent-house de 1.700 metros cuadrados que habitaba eran parte del legendario edificio Mónaco, construido en el barrio de Santa María de los Ángeles, en Medellín. Los otros pisos lo ocupaban sus secuaces, personal de servicio o invitados. El edificio tenía una bóveda inmensa donde Escobar apilaba su dinero.
5.- Las más hermosas flores con recambio diario: Para que el lugar estuviera bien decorado, a diario eran traídas flores especialmente desde Bogotá a Medellín para adornar el gigantesco inmueble. Para el transporte se usaba el avión privado de Escobar.
Este es el edificio Mónaco donde vivía Escobar en Medellín.
6.- Millonarios gastos en fuegos artificiales para las fiestas: A Pablo Escobar le encantaban los fuegos artificiales, por lo que para las grandes celebraciones en la hacienda Nápoles llegó a importar contenedores con estos productos que costaban hasta 50 mil dólares cada uno. Una parte la usaba él y otra la regalabas a sus hombres.
Pablo Escobar con algunos de los secuaces que trabajaban para él.
7.- Fiestas temáticas sin reparar en gastos: A la esposa de Escobar le encantaban este tipo de fiestas. A tanto llegaba el gasto, que a cada uno de los invitados se le asignaban modistas y sastres para que les hicieran los disfraces a medida, según ha relatado el propio hijo de Escobar.
La familia Escobar en una de las tantas fiestas temáticas que realizaron.
8.- Regalo de costosas obras de arte originales: Escobar realizaba fiestas para sus cumpleaños en las que se rifaba entre los invitados obras de arte originales que podían llegar a costar varios millones de dólares.
9.- Dinero quemado para calentarse en un día frío: Un día, cuando se encontraba prófugo de la justicia oculto en una precaria casa acompañado de su familia, Pablo Escobar quemó alrededor de dos millones de dólares para darle calor a su hija Manuela, quien se encontraba enferma.
La foto muestra la serie El Patrón del Mal que contó la vida del narcotraficante colombiano.
10.- Regalos en el cumpleaños de su hijo: “En mi noveno cumpleaños, 1996, recibí un regalo único que en medio de mi inmadurez no tuvo mayor significado: un cofre con las cartas de amor originales que Manuelita Sáenz le escribió al libertador Simón Bolívar. También recibí varias medallas del libertador. En 1988, cuando cumplí once años, ya tenía una colección de cerca de treinta motos de alta velocidad, así como motocrós, triciclos, cuatrimotos, carts, y buggies de las mejores marcas. También tenía treinta motos de agua. Tenía trece años y se decidió que para minimizar los riesgos de seguridad yo tuviera un apartamento de soltero; el lugar tenía dos grandes habitaciones, la mía con espejos en el techo, bar con diseño futurista, piel de cebra en el living y una silla de Venus”. Esto corresponde al relato de Juan Pablo Escobar Henao, hijo de pablo Escobar, en su libro “Pablo Escobar, mi padre”.
La celebración de uno de los cumpleaños de Juan Pablo Escobar Henao.
tomada de: Gioteca
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