Menor baleado por militares se recupera en hospital brasileño
El menor de 13 años, Fabricio Flores Chayaña, baleado el miércoles por militares de la Armada Boliviana en Guayaramerín, será sometido a una nueva intervención quirúrgica dentro de nueve días.
La decisión fue adoptada por los galenos del Hospital de Porto Vehlo, tras una evaluación realizada en las últimas horas, según fuentes próximas a la familia.
Fabricio Flores fue víctima de un disparo que destruyó parte de de su pierna derecha y en la actualidad recibe atención especializada en el hospital Joao Paulo de Porto Velho, capital del estado de Rondonia en Brasil.
Fuentes del nosocomio señalaron que el niño fue operado de urgencia para intentar salvar el pie que fue destruido por un proyectil, y al momento se aguardan reacciones positivas para el funcionamiento de las articulaciones, venas y masa ósea reconstruidas.
Los médicos manifestaron que se aguardarán 9 días para practicar una nueva cirugía y, por el momento, existe optimismo por la recuperación del menor boliviano, aunque su estado es delicado.
Incidente
El niño de 13 años fue baleado en el río Mamoré, fronterizo entre Bolivia y Brasil, el mismo instante que juntos a su abuelo intentaba llegar hacia el lado brasileño desde la ciudad boliviana de Guayaramerín, en una embarcación.
El hecho se produjo en horas de la madrugada del miércoles, oportunidad en que efectivos militares navales efectúan control fronterizo.
Flores inmediatamente fue socorrido por efectivos de la policía federal brasileña y trasladado de urgencia hasta un hospital del vecino país.
Vecinos de Guayaramerín manifestaron su contrariedad contra los militares y exigieron sanciones drásticas.
El menor Fabricio Flores Chayana señaló que los disparos provinieron de “leopardos”, en alusión al uniforme que utiliza una fuerza militar boliviana especializada en la lucha contra el narcotráfico.
