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La crecida del río Tijamuchí obligó a las autoridades declarar en alerta roja a este afluente ubicado en el departamento del Beni y el nivel de sus aguas ponen en riesgo a por lo menos tres comunidades y más de un centenar de familias.
El viceministro de Defensa Civil, Óscar Cabrera, agregó que este río al momento es monitoreado por el Servicio de Mejoramiento de la Navegación Amazónica (Semena). Por otro lado, el Servicio de Hidrografía Naval hace el seguimiento de los ríos Acre, Madre de Dios, Beni, Ibare y Yacuma.
“Esos son los datos en general de todo lo que son los ríos que están aumentando su nivel en la parte amazónica”, afirmó la autoridad gubernamental.
Los desastres naturales en el país dejaron hasta la fecha 18 muertos, además de una afectación en 238 viviendas, siete mil hectáreas de cultivos y 13 mil familias a nivel nacional.
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