Petroleros hacen su congreso en medio de cuestionamiento

La Federación Sindical de Trabajadores Petroleros de Bolivia se reúne desde este jueves en su XVII congreso nacional en la ciudad de Cobija, en medio de denuncias irregularidades y actos de corrupción que implican a ejecutivos sindicales por los supuestos aportes electorales desde YPFB a la campaña electoral del candidato del MAS a la Gobernación de Santa Cruz Rolando Borda el año 2015. 

El congreso tiene como agenda la rendición de cuentas y elección del comité sindical para la gestión 2019-2023. No se descarta que el actual ejecutivo José Domingo Vásquez busque su reelección en el cargo que ocupó durante los últimos trece años. El evento se extenderá hasta el sábado con la participación de casi un centenar de dirigentes de 28 sindicatos afiliados.

El diputado Luis Felipe Dorado cuestionó la presencia del dirigente de YPFB-Aviación Marcos Melgarejo, quien con 17 votos de  53 trabajadores se prorrogó en una asamblea sin quórum, bajo la consigna de apoyar la reelección de José Domingo Vásquez,  lo que en su criterio, cerrará una “cadena de corrupción sindical” porque asistirán al mismo evento Borda, Vásquez y Melgarejo.

Fuentes de YPFB-Aviación denunciaron este jueves que Melgarejo  logró sacar un anticipo de cuatro meses de aportes laborales (2,5% del total ganado) para cubrir su viaje a Cobija junto a tres dirigentes.

“La gente ya está acostumbrada a que no pasará nada cuando se trata de corrupción de gente ligada al gobierno. El presidente Morales reveló su secreto bancario y sin embargo sus funcionarios no quieren hacerlo y sobre todo las cuentas del señor Melgarejo”, manifestó Dorado.

Recordó que Borda negó haber recibido los 142 mil bolivianos como aportes, pero José Domingo Vásquez confirmó que hay aportes, pero de carácter personal. “¿A quién le vamos a creer a Borda, Vásquez, Melgarejo? ¿Dónde está Transparencia, la ASFI y la UIF? Es importante que las entidades digan qué se hizo el dinero y quién cobró esa plata”, emplazó.

Sostuvo que cualquier persona, para retirar 50.000 bolivianos, debe llenar un formulario y declarar el destino del dinero, pero en este caso los dirigentes de YPFB gozan de libre albedrío “para poder hacer lo que le da la gana“.

El otro caso es que Melgarejo no aclaró la denuncia de corrupción formulada por la Fiscalía de Santa Cruz, por haberse transportado a un motel, usando una movilidad supuestamente estatal. A raíz de eso enfrenta un proceso penal, donde se descubrió que esa empresa no había sido nacionalizada.