Colectivo urbano de Cochabamba pide a Evo reconducir el proceso de cambio

El Colectivo Urbano por el Cambio (CUECA) de Cochabamba pide al gobierno del presidente Evo Morales reconducir el proceso de cambio y retornar a sus cauces iniciales de los primeros dos años de gestión para evitar que este fracase.

En un pronunciamiento público critica cinco puntos a reconducir. El colectivo expresa su preocupación y demanda recuperar los principios fundamentales  del proceso.

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Ante las repetidas expresiones del presidente Evo Morales en el sentido de que la derecha pide la reconducción del proceso, y de que él no entiende en qué puede consistir dicha reconduccíón, el Colectivo Urbano por el Cambio quiere dejar clara su posición ante la opinión pública y ante nuestro Gobierno.

La derecha no quiere reconducción ninguna del proceso, lo único que quiere es que éste fracase. Los que pedimos una reconducción no somos de derecha, ni de la oposición en general; creemos que el proceso de cambio es posible, que la re-fundación de nuestro país no debe postergarse, y precisamente por eso es nues-tro deber pronunciarnos cuando vemos cosas que no están bien:

1. En lo Social

Se trata de volver a los niveles de participación social que caracterizaron los primeros años del proceso —participación de la sociedad civil en su conjunto, y no sólo de unas cuantas organizaciones y dirigentes—, sobre todo en la elaboración de las leyes, ordenanzas, y decretos. Esto, aparte de ser un derecho inalienable, podría ayudar a evitar errores y desviaciones.

Se trata de recuperar la vocación incluyente de los primeros años de gobierno, cuando no se descalificaba a ningún sector ni pueblo y se afirmaba que el cambio no es propiedad privada de nadie.

2. En lo Político

Se trata de recuperar la convicción de que ésta es una revolución democrática y cultural, por tanto dos veces lenta, y que se tiene que avanzar con paciencia, ya que a la población hay que educarla y convencerla, no vencerla a cómo dé lugar, ni mucho menos perseguirla.

Se trata de reconocer, analizar y corregir nuestros errores y aprender de ellos. De abrir espacios de reflexión dentro del gobierno y de la sociedad, con análisis y propuestas colectivas. Espacios de reconocimiento de todas nuestras culturas y diversidades, un reconocimiento que se traduzca en propuestas de políticas públicas aplicables.

3. En lo Filosófico

Recuperar los principios fundamentales que orientaban nuestro quehacer político y económico, entre los que sobresalen la afirmación presidencial de que los derechos de la Madre Tierra están por encima de los derechos humanos, así como la afirmación constitucional de que el nuevo horizonte de nuestro pueblo es el Vivir Bien, y no el viejo y desacreditado desarrollismo.

Por tanto se trata de trabajar el tema de la Descolonización y Despatriarcalización en todos los aspectos: la educación, la salud, la relación con la naturaleza, las relaciones sociales, las propias estructuras estatales, las expresiones cívicas, la reverencia por los títulos académicos, etcétera.

4. En lo Económico

La reconduccíón consistiría en recuperar el sentido de las luchas que hicieron posible este proceso y que quedaron impresas en la nueva Constitución:

- Superar el modelo de desarrollo extractivista y avanzar en la industrialización.
- Promover y proteger la producción interna (y terminar en los hechos con el 21060).
- Superar la ineficiencia de la gestión pública, ya que se cuenta con recursos muy superiores a los de gestiones pasadas.
- Avanzar de verdad en la soberanía alimentaria, sin priorizar las exportaciones y sin liquidar nuestros bosques.
- Recuperar la política nacionalista asumida el 2006 frente a las transnacionales petroleras, y además aplicarla a la minería (sometiendo a control a las transnacionales, haciendo real la planta estatal de litio).
- Exigir que las cooperativas mineras que sean cooperativas de verdad y se atengan a las leyes.
- Estudiar y traducir en políticas nuevos modelos productivos que apunten al Vivir Bien.

5. En lo Ético

Reconducir el proceso sería aplicar la ley Marcelo Quiroga para acabar de veras con la corrupción (y no como arma de lucha política), empezando por limpiar el actual aparato del estado.

La trasparencia de la gestión —¿en qué se gasta la plata?— tiene que ser pública, permanente y en todos los ámbitos; y para ello tiene que haber información accesible para todos y todas.

Cochabamba 6 de septiembre de 2012