Policía desaloja protesta de indígenas brasileños
La Policía del estado brasileño de Río de Janeiro tomó hoy a la fuerza la sede del antiguo Museo del Indio, una edificación ocupada desde 2006 por miembros de diferentes etnias que prometían resistir a una orden de desalojo expedida por la justicia.
Los agentes que habían cercado el predio desde esta madrugada ingresaron al local poco antes del mediodía tras el fracaso de las negociaciones para que los indígenas abandonaran pacíficamente la edificación, vecina al estadio Maracaná y que será convertida en un museo deportivo como parte de las obras para el Mundial de fútbol que Brasil organizará en 2014.
Pese a que la Policía controló rápidamente a los cerca de 40 indios atrincherados en el antiguo museo, abandonado desde 1978, hubo forcejeos con decenas de manifestantes que apoyaban a los ocupantes en la parte de afuera, y los agentes usaron gases lacrimógenos para restaurar el orden.
Numerosos estudiantes, integrantes de organizaciones sociales y militantes de partidos de izquierda se habían concentrado en los alrededores del antiguo Museo del Indio luego de que la Policía les impidiera entrar a la edificación para apoyar a los ocupantes.
Con el inicio de la ocupación, los manifestantes bloquearon la avenida frente al palacete, lo que provocó enfrentamientos con los uniformados y una confusión que se expandió por varias calles.
La Policía, que arrestó a varios manifestantes, necesitó de más de veinte minutos para reabrir el tránsito en las calles bloqueadas por las protestas y dispersar finalmente a la multitud.
Los agentes recibieron la orden de ocupar el otrora museo luego de que la gobernación de Río de Janeiro fracasara en el intento de convencer a todos los ocupantes de abandonar la edificación.
"Conseguimos que los más ancianos, los niños y gran parte de los adultos saliese pacíficamente del edificio y aún esperábamos la respuesta del restante de los ocupantes cuando los agentes recibieron la orden para el desalojo", afirmó el defensor público Daniel Macedo, uno de los intermediarios en las negociaciones.
Los indios que aceptaron salir del predio fueron acomodados temporalmente en un hotel.
La gobernación de Río de Janeiro propuso construir un centro cultural para los indígenas en otro lugar, para lo que ofreció tres terrenos en la zona oeste de la ciudad, pero los ocupantes alegaron inicialmente que estarán alejados del centro de la ciudad y aislados.
La edificación en disputa, vecina al Maracaná y construido en 1850, albergó el Museo del Indio entre 1910 y 1978, año en el que fue abandonada y el acervo trasladado a otra dirección en el barrio de Botafogo.
La construcción permaneció abandonada por casi tres décadas y en 2006 fue ocupada por indios que necesitaban de un lugar para alojarse en sus visitas a Río de Janeiro. (Terra)
