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El nuevo Fondo de Desarrollo Indígena (FDI) cuenta con un presupuesto de 177 millones de bolivianos para esta gestión y se estima que empezará a hacer sus primeros desembolsos desde el mes de julio, tras quedar intervenido en febrero de 2015 por supuesta corrupción y proyectos “fantasmas”.
El director Ejecutivo de la entidad estatal, Eugenio Rojas, declaró a Erbol que al momento se elabora un informe de los más de 200 proyectos de continuidad que fueron transferidos por la Unidad de Liquidación a su dirección para que termine de ejecutarlos.
Indicó que el presupuesto no sólo servirá para cerrar dichas obras productivas, sino también para financiar otras nuevas.
“Para este año se tiene planificado 177 millones, es de gestión, es el presupuesto aprobado (…) y esto es para proyectos que vamos a continuar, es una parte eso, la gran parte es para los proyectos nuevos que vamos a comenzar en los próximos meses, no sabemos si va ser el mes de agosto o en julio. Yo creo que nuevos proyectos vamos a empezar desde julio”, adelantó Rojas.
El FDI, antes Fondo de Desarrollo Indígena Originario Campesino (Fondioc), contaba con un presupuesto anual desde 300 hasta 600 millones de bolivianos, provenientes del Impuesto Director a los Hidrocarburos (IDH). Según Rojas, que asumió el cargo en septiembre de 2015, los recursos se redujeron porque el costo del barril de petroleó cayó en el mercado extranjero.
Señaló que de los proyectos productivos que deben ser cerrados y que cuentan hasta con un segundo desembolso del liquidado Fondioc, aún se debe conocer el estado de cada uno de ellos. Anunció que no se entregará recurso para las obras “malas”, es decir, que no estén adecuadamente ejecutadas.
“El exFondo nos ha transferido a través de la Unidad de Liquidación, 211 proyectos, hemos evaluado estos proyectos y también hemos verificado en el campo, estamos en proceso de elaboración de informe y una vez que se concluya ya se pueda desembolsar, no será a todos, los proyectos que están mal no vamos a poder desembolsar”, aseveró.
Datos
De acuerdo con el informe de intervención que hizo el gobierno al desparecido Fondioc, de 1.100 proyectos, 700 quedaron observados, 30 son “inexistentes” y 200 deben concluirse. Según el mismo, se estima un daño económico al Estado de 120 millones de bolivianos y Bs44MM por proyectos “fantasmas”.
Este caso derivó en el la detención de dirigentes y exdirigentes campesinos aliados al gobierno del Movimiento Al Socialismo (MAS). Además de los directores ejecutivos: Elvira Parra y Marco Aramayo, por aparente incumplimiento de deberes. Mientras se encuentra prófugo Daniel Zapata, quien también fungió como director del Fondioc.
Aramayo responsabilizó a la expresidenta del Directorio del Fondo y exminsitra de Desarrollo Rural y Tierras, Nemesia Achacollo, de todo lo ocurrido en esa instancia. El Ministerio Público anunció que la convocaría para las investigaciones, pero hasta la fecha no lo hizo.
El exFondioc estaba manejado por ocho organizaciones campesinas e indígenas del denominado Pacto de Unidad, un frente de defensa del gobierno del presidente Evo Morales.
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