Denuncian que Gobierno negó 2 veces visita de Anaya
El dirigente de la Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas (CAOI), Rafael Quispe, denunció que el gobierno del presidente Evo Morales negó en dos oportunidades la visita al país del Relator Especial de las Naciones Unidas Sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, James Anaya, para que éste no conozca de voz de los propios indígenas la vulneración de sus derechos de parte del Ejecutivo.
Quispe dijo que fue el propio Relator Especial quien dio a conocer este hecho, tras una reunión que sostuvieron a finales del pasado año en Ginebra.
Anaya contó a los dirigentes indígenas que en dos oportunidades pidió llegar al país; la primera en 2011, luego de la represión policial a la VIII marcha de la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (CIDOB) en Chaparina y la segunda a mediados de 2012, cuando la IX marcha llegó a la sede de gobierno.
“Después de la ‘masacre’ de Chaparina el señor James Anaya ha enviado una carta al gobierno boliviano para que se le permita llegar a Bolivia, pero no obtuvo respuesta y por eso nos ha pedido en la reunión que tuvimos, hablar con Cancillería para su visita al país”, señaló Quispe a la Agencia de Noticias Indígenas de Erbol.
Canciller
Según Quispe, la Cancillería de Bolivia es la que no permite que Anaya ingrese a Bolivia. Dijo que al gobierno no le conviene que la violación de los pueblos indígenas sean conocidas por Naciones Unidas para que trabaje en un informe y se eleve a una Asamblea del organismo internacional.
Consultado sobre este tema, el Canciller David Choquehuanca sólo se limitó a señalar que el Relator Especial coordina con los gobiernos su arribo a un determinado país. “Los relatores coordinan con los gobierno, no pueden venir invitados por una organización y si hay una invitación de una organización tiene que coordinarse con el gobierno esa solicitud”, aseveró.
El dirigente de la COI relató que en el encuentro con James Anaya se hizo conocer las irregularidades de la consulta sobre la construcción de una carretera en medio del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS) y la violenta intervención policial a la VIII marcha indígena.