Justicia chiquitana sanciona con chicotazos y expulsión
Delitos menores como robo de gallina, disputas internas, entre otros, son sancionados por los chiquitanos en sus comunidades con chicotazos y en caso de que la persona vuelva a incurrir en la misma falta en tres oportunidades es expulsado, todo ello como parte de la justicia indígena originaria, explicó el cacique de Educación y Cultura de la OICH (Organización Indígena Chiquitana), Herlan Dorado.
Contó que la determinación se toma en reuniones comunales y asambleas que son precedidas por el Gran Cacique, donde además se presentan las partes en conflicto y en ese momento se define la pena que ellos conocen como media arroba y una arroba, en referencia al número de latigazos que recibirá el culpable de un delito, es decir, una arroba 12 golpes.
“El pueblo Chiquitano establece su justicia de acuerdo a las decisiones comunales. Son errores leves que se resuelven dentro de la comunidad y la Asamblea. Nosotros llamamos a los chicotazos arroba, media arroba, una arroba de acuerdo al delito”, declaró Dorado a la Agencia de Noticias Indígenas de Erbol.
Aclaró que tras la promulgación de la Ley de Deslinde Jurisdiccional, los delitos graves como asesinato y violación pasan a la justicia ordinaria.
Sal a las heridas
Herlan Dorado indicó que se llegó a sancionar a una persona con dos arrobas y media de chicotazos. Recordó que esta forma de juzgar se da mucho antes; “desde los abuelos de su abuelo”, incluso dijo que a las heridas provocadas por el látigo en el cuerpo de una persona les ponían sal para que el indígena escarmente y se corrija.
“Eso hacemos para que se pueda corregir la persona, para que reflexione porque queda como escrito la sanción en la comunidad y debe tomar precaución y mejorar la conducta ante la comunidad”, afirmó.
En algunos casos el indígena acusado de cometer un delito, y al comprobarse el mismo, puede acceder al perdón en la Asamblea, pero de volver a fallar la sanción es más fuerte.
“En cierta forma funciona, ya si él vuelve a reincidir, después de ser disculpado por la Asamblea la sanción es más fuerte y si vuelve a cometer un delito más grave lo pasamos a la justicia ordinaria”, finalizó.