Juicio laboral que perdió Toto Arévalo duró 20 meses
Un juicio laboral que interpuso el periodista Francisco Horacio Millares Murillo por el pago de beneficios sociales, contra el director de Deporte Total, Alfonso Toto Arévalo, duró 20 meses, por “dilación”, según un memorial presentado el 10 de abril de 2013 ante el Juzgado Tercero del Trabajo y Seguridad Social.
En el documento que antecede al fallo que obliga a los propietarios de Difusora Arévalo SRL a cancelar Bs. 60.800 por 8 años, 11 meses y 26 días a favor del demandante, éste(Millares) denuncia actos dilatorios y pide al juez “respeto a la Ley” y dicte “sentencia probada” a su demanda.
Incidentes de impersonería , deslealtad procesal, exhortos para el cumplimiento de decretos, proposición de pruebas, devolución de cedulones y otros, son los argumentos que cita su defensa, Carlos Contreras Romero, en el escrito.
El 26 de agosto de 2011, Millares le inició una demanda social contra la Empresa Difusora Arévalo SRL, por un segundo contrato y el 12 de abril de 2013 salió el fallo a favor del trabajador. 24 horas después la sentencia fue apelada a una instancia superior.
Respeto a la Ley y Orden
En el memorial dirigido al juez de trabajo Millares identifica “manifiesta dilación por más de 20 meses” desde la presentación de la demanda.
“(El demandado presenta) incidentes de impersonería, por la astucia criolla y deslealtad procesal, no señalando domicilio procesales; erogando gastos procesales por exhortos suplicatorios para el cumplimiento de simples decretos que pudieron ser resueltos por su autoridad, con el mismo principio que usted manifestó en audiencia siendo el director del proceso”, indica.
Francisco Millares reclama celeridad en el proceso y contra actitudes dilatorias de la defensa de los esposos Arévalo.
“(Ellos –en el proceso- desconocieron) al representante vigente de la empresa Difusora Arévalo SRL, aspecto legal que procedió mediante auto de relación procesal a asumir defensa a los demandados Alfonso Arévalo y Sonia Deheza de Arévalo como socios”, agrega.
En el segundo acápite del memorial, cuestiona al juez por la “excesiva consideración (del operador de justicia) con la parte demandada, transgrediendo las normas legales de orden civil y laboral”.
“Señor Juez a su vez de manera ilegal y en total confusión pero evidenciando a falta de lealtad a un debido proceso; en el cual los esposos demandados de la empresa Difusora Arévalo SRL, en la tramitación del proceso, estos señores negaron afinidades entre sí, desvirtuando ser representantes de la sociedad demandada”, denuncia.
Otro antecedente del reclamo va relacionado cuando el 7 de octubre de 2011 Patricia Chávez Sejas, funcionaria de Mundial Servicios Publicitarios de Cochabamba, en carta enviada al mismo juez del caso, dijo desconocer a Alfonso Arévalo, a raíz de la entrega de un cedulón.
“Desconozco a esa persona (Toto Arévalo) y que la empresa mencionada (Difusora Arévalo SRL) no tiene oficinas en mi lugar de trabajo”, afirma.
