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Una volqueta del Servicio Departamental de Caminos (Sedcam) fue retenida por un grupo de indígenas de la comunidad San Miguel de Machineri, municipio de Bolpebra del departamento Pando, después de que fue descubierta transportando 3.760 pies de madera de contrabando, presuntamente con destino a una población del Perú, según una publicación de “Perla del Acre”.
Ante la denuncia de los comunarios, el pasado jueves, una comisión institucional, conformada por la Autoridad de Bosques y Tierras (ABT), el Ministerio Público y el Comando Conjunto Amazónico, se trasladó hasta la población indígena ubicada en la frontera con el Perú, donde se encontraba retenida la volqueta del Sedcam –de la Gobernación de Pando– con decenas de tablones de madera cedro.
“En la comunidad San Miguel de Machineri logramos recuperar el motorizado y verificamos más de 70 tablones de madera que habían sido secuestrados por los mismos pobladores, en su afán de proteger a su territorio y evitar la tala indiscriminada de los recursos naturales de la amazonia boliviana, también denunciaron a los presuntos autores ya que se estarían cometiendo constantemente ese tipo de actos ilícitos”, explicó el fiscal de materia José Luis Quispe.
El representante del Ministerio Público explicó que el grupo de indígenas había procedido a la retención de la volqueta color blanco y amarillo con placa de control NDA – 0434, perteneciente al Servicio Departamental de Caminos, a mediados del mes de septiembre porque sospechosamente trasladaba sin el permiso correspondiente una cantidad exagerada de madera.
Los comunarios ratificaron su denuncia en la ABT y en el Ministerio Público señalando que algunos ciudadanos bolivianos, entre ellos funcionarios de la institución pública, en complicidad con súbditos peruanos, cometen la tala indiscriminada de árboles y la comercialización ilegal de los recursos naturales.
“Según la denuncia de los indígenas, esa madera tenía destino hacia el vecino país y estaba lista para su comercialización, ya que después de retener la volqueta, un ciudadano peruano se habría apersonado al grupo de indígenas para ofrecerles una importante cantidad de dinero por la madera y ese hecho motivó para que los dirigentes de esa comunidad hagan su denuncia ante las instancias correspondientes, para que se sancione a los responsables”, manifestó Quispe.
Tras investigar el caso que involucra a un vehículo del Estado, el Ministerio Público imputó por el presunto delito de destrucción de la riqueza natural y bienes del estado a Nelson Díaz Cabral, chófer de la volqueta, y a Pablo Siani, responsable de un grupo del Sedcam, quien habría dado la orden para el traslado de la madera.
En audiencia de medida cautelar ante el Juzgado Segundo de Instrucción Penal de la capital pandina, el juez Diego Roca determinó medidas sustitutivas para ambos funcionarios.
“El señor fiscal (Cleto Ayaviri) ha visto conveniente imputar por el delito de destrucción de bienes del estado y no así por uso indebido de bienes del estado, pese a que habían sido sorprendidos por miembros de una comunidad indígena transportando madera en un camión de una institución pública. No se ha encontrado en poder de los imputados ningún elemento u objeto que pueda hacer presumir que ellos hubiesen destruido o cortado la madera, la misma debe ser esclarecido por la ABT”, justificó.
Un supuesto favor a comunario
En contacto con Perla del Acre, el conductor de la volqueta, Nelson Díaz Cabral, señaló que no tenía intención de negociar con la madera y menos llevar hacia la población peruana. Aseguró que simplemente se trataba de un favor a un comunario, quien le solicitó trasladar la madera a una vivienda y en el trayecto fueron detenidos por un grupo de indígenas.
“No es una destrucción de bienes del estado como menciona el fiscal, simplemente estoy involucrado en esta denuncia por hacer un favor a un comunario que me pidió que le traslade unas cuantas tablas de madera y casualmente un grupo de campesinos me quito la llave de la movilidad señalando que estábamos haciendo mal uso de la movilidad y contrabando de la madera, pero nada de lo que dicen es cierto”, enfatizó.
A su turno, Pablo Siani, responsable seccional, reconoció que dio la orden al conductor para hacerle un supuesto favor a un comunario para trasladar madera desde una empresa de aserradero hasta una vivienda, sin embargo se enteró que trasladaron otro tipo de madera y en mayor cantidad.
“Este problema que enfrentamos es por hacer un bien social a las comunidades, reconozco que yo ordené al chofer de la volqueta para que traslade 10 docenas de maderita desde un aserradero hasta la vivienda y el comunario se aprovechó de nuestra generosidad cargando otra madera ilegal en mayor cantidad y entonces quedó mal el chofer y mi persona como encargado de este grupo del Sedcam. También quiero hacer conocer a las autoridades que el señor Ceferino Santos haciéndose pasar por director de la ABT es quién quitó la llave al chofer de la volqueta”, apuntó.
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