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Inusuales y fuertes vientos registrados el lunes y martes de esta semana provocaron destrozos considerables en las islas flotantes y granjas piscícolas del lago Titicaca. Los techos de las casas se rompieron, los árboles cayeron y las jaulas de peces se partieron en dos, reportó radio Copacabana de la Red ERBOL.
Los vientos se registraron desde el lunes por la noche y duraron hasta el martes por la tarde. El fenómeno natural causó que algunas de las islas flotantes se hundieran parcialmente y que en otras el suelo que las sostiene se partiera en dos.
También las jaulas de peces se partieron, causando que las truchas, ispis y otros animales acuáticos huyeran a las aguas del Titicaca. Esto provocó un serio daño económico para los pobladores que invirtieron su capital en estas granjas con el fin de comercializar los peces a los negocios que venden platos típicos a los visitantes.
Felipa Mendoza, propietaria de una de las islas flotantes de la comunidad San Miguel de Hueco, manifestó su preocupación e impotencia con lágrimas en los ojos.
“El lunes en la noche se ha cortado la luz, nos hemos asustado. Ahora lo hemos perdido todo, ¿qué vamos a hacer? Todo está roto, no tengo nada”, expresó.
Asimismo quienes pertenecen a la Federación de Transporte Lacustre y Turismo en Copacabana lamentaron los destrozos que sufrieron sus instrumentos de trabajo.
Las lanchas, botes y otros medios de transporte utilizados para vender paseos por el lago Titicaca, se hundieron y otros fueron destruidos casi en su totalidad.
“Hay bastante preocupación e impotencia sin saber qué hacer. Más aún porque se acerca la Feria Binacional que se realizará en los meses de julio y agosto aquí en Copacabana”, indicó la emisora del lugar.
Los pobladores piden ayuda a las autoridades para que se reponga, al menos en parte, el capital perdido en sus fuentes de trabajo.
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