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El Gobierno chileno destituyó al Intendente de la Araucanía, Francisco Huenchumilla, quien elaboró un documento en el cual propone que Chile se convierta en un Estado plurinacional.
“Yo la impresión que tengo es que el gobierno le tuvo miedo a la propuesta que yo iba a hacer, porque era contundente y exigía tomar medidas políticas que no se han tomado”, señaló Huenchumilla, en una entrevista con radio Bío Bío, mencionada por La Tercera.
El documento escrito por el ahora exintendente se denomina Propuesta al Gobierno respecto de la Situación de la Región de la Araucanía. Él lo elaboró como una alternativa para superar el llamado “conflicto mapuche”.
En el marco de este conflicto se han registrado incidentes violentos de parte de algunos indígenas mapuches, quienes piden al Estado chileno la devolución de sus tierras y un reconocimiento político.
Para Huenchumilla, este problema no se solucionará mediante los tribunales y la Policía, sino es un tema de orden político.
“Una solución al conflicto de la Araucanía, pasa por un acto de realismo del Estado de Chile. Aceptar que existen pueblos originarios anteriores a la formación del Estado y uno de los cuales y el más importante, es el Pueblo Mapuche. Aceptar esta realidad implica cambiar la estructura del Estado-Nación, a un Estado plurinacional que necesariamente debe verse reflejado en el pacto político que es la Constitución Política”, indica en su propuesta, difundida por La Tercera.
La exautoridad advirtió que habría descontentos con su propuesta y argumentó que el 90% de los países afiliados a la ONU son plurinacionales.
“El acto de ficción que creó el Estado-Nación pensando que única y exclusivamente existían chilenos desconociendo a los pueblos originarios fue un acto propio del siglo 19 que hoy no resiste un análisis serio. En los países desarrollados esto ya no es tema pues todos han hecho un acto de sincerar su realidad sociológica configurando estados plurinacionales; esto es así en el 90% de los estados afiliados a las Naciones Unidas (…) Esto (para tranquilidad de algunos exaltados no pensantes) no tiene nada que ver con la unidad política del Estado. Porque una cosa es la unidad política y otra cosa es la realidad sociológica”, explicó.
Además, en el orden político, Huenchumilla planteó que en el Parlamento chileno haya “escaños reservados” para indígenas.
“Proponemos que sean diez diputados, siete para el pueblo mapuche, uno para el pueblo rapa nui y dos para el resto de los pueblos originarios. Y en el Senado que existan tres representantes”, escribió.
Asimismo, propuso al Estado chileno devolver a los mapuches las tierras que les arrebataron en el siglo XIX.
Economía mapuche nunca fue capitalista
“La economía mapuche nunca fue capitalista en el sentido que hubiera un proceso de acumulación de excedentes que moviera las actividades productivas. Había sí una fuerte economía de mercado, de comercio y de intercambio, pero sin persecución de excedentes utilitarios”, según la propuesta de Huenchumilla.
Sostuvo que para los mapuches “las tierras forman parte de su existencia y su cosmovisión”, y el “mundo chileno” reproduce un modelo neoliberal donde “la sociedad no existe, lo que existe es el individuo”.
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