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El presidente Evo Morales emplazó la mañana de este miércoles a los ministros, viceministros y presidentes empresas públicas y entidades descentralizadas, a cumplir una gestión sin errores, corrupción y sin funcionarios públicos que a título de invitados cumplan tareas sin compromiso político.
Dijo que hay denuncias que ministros, viceministros y otros funcionarios jerárquicos, contratan a sus amiguitos y familiares sin ningún compromiso político. "Que van a ayudar, es sumarse agentes infiltrados que en lugar de trabajar, llenan crucigramas", indicó.
“Quiero que sepan y digo públicamente, no queremos servidores públicos que estén chupándome las tetillas, se acabó eso, se acabó eso. Ya hemos sido muy tolerantes, muy amplios pero también algunos compañeros se pasan. Estamos viendo contra el Evo, contra el proceso. Ese que está protestando contra el proceso pero que es funcionario público, qué va a trabajar pues. Entrará a perjudicar, hacernos quedar mal, y que este gobierno fracase”, manifestó.
Recordó que hace once años llegaron sin experiencia alguna y probablemente por eso los ministros solo informaban lo que estaba bien y no lo que estaba mal. Morales sostuvo que cuando la información es de primera sobre la gestión pública y los conflictos sociales, se toman buenas decisiones entre el equipo de ministros.
“Cuando algunos ministros nos informan mal, decidimos mal y se profundiza el conflicto social. Estamos a once años y estos errores no pueden haber en temas de gestión pública y acción política”, manifestó durante sus palabras de inauguración del gabinete ampliado que se reúne en el campo ferial Chuquiago Marka en la zona sur de La Paz
En contrapartida, sostuvo que en once años Bolivia ha cambiado y eso es más que los 180 años de vida republicana que tuvo el país, adecuando el gabinete a las necesidades que se presentan como la reciente creación del Ministerio de Energía.
Aseguró que entre agosto y octubre de 2008 definieron el rumbo del país en una pulseta porque revivió la derecha en el referendo revocatorio, pero fue aplastada por los movimientos sociales que aseguraron el actual proceso de revolución, desechando la teoría de la oposición que el gobierno del MAS duraría dos a tres años.
Morales considera que esa etapa logró conjurar un “golpe de estado” porque la oposición asentada en algunas prefecturas tocó puertas de los cuarteles para que los militares se sumen a la supuesta conspiración contra el gobierno de corte socialista.
También hizo referencia a las movilizaciones por la aprobación de la Constitución Política del Estado aprobada por la Asamblea Constituyente, pero que no podía concretarla porque el Senado estaba bajo control de la oposición. Pero al final lograron hacerla aprobar y someterla al referendo constitucional donde ganó con más del 70%.
“Ahí terminó la batalla política ideológica, intentaron el estatuto autonómico con un millón de personas. Qué millón? y la marcha del Tipnis, hay tantas historias para contar”, manifestó el mandatario al destacar la modalidad de su gobierno de analizar de manera ampliada las obras y proyectos de gobierno que tiene en agenda.
Asimismo destacó el crecimiento económico que registró su gobierno, con una inflación controlada, inversión estatal que subió de 498 millones a 3600 millones de dólares, créditos otorgados a los sectores productivos y vivienda en moneda nacional.
Sin embargo el mandatario exhortó a eliminar la micro-corrupción en la contratación de personal y renovar contratos temporales sobre todo en el área de salud y educación, por lo cual, exhortó a los ministros y viceministros cortar de raíz esta mala práctica de incluso cobrar en calidad de coima, los dos primeros sueldos del funcionario contratado.
Criticó duramente el tema burocrático que evita asumir decisiones con la rapidez que él exige y advirtió que la reunión del Conalcam decidió hacer un código del servidor público, porque en algunos ministerios hay mal trato a la gente con el “vuélvase mañana y pienso que algunos insinúan para sacar plata”, indicó.
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