Mandatarios sudamericanos estarán en misa del papa
Rousseff viajó el domingo a Roma. El viernes, destacó la importancia de su visita al Vaticano, pues como presidenta representa a la mayor población de católicos del mundo, unos 123 millones de personas.
Se prevé que la mandataria brasileña sea recibida por el nuevo pontífice, pero de momento se desconoce el horario del encuentro, informa hispantv.com
Rousseff, tras el nombramiento del pontífice, le envió una carta de felicitación y manifestó su deseo de recibir su visita en la Jornada Mundial de la Juventud, que se celebrará en julio próximo en la ciudad de Río de Janeiro.
“En nombre del pueblo brasileño felicito al nuevo papa Francisco (...) Brasil ha seguido con atención el cónclave y la elección del primer papa latinoamericano”, decía en la misiva.
Asimismo, el mandatario mexicano, Enrique Peña Nieto, viajó el domingo al Vaticano, a fin de participar en la misa de investidura del papa Francisco I.
Peña Nieto, en su agenda, tiene programado entrevistarse con el pontífice Francisco I y sostener encuentros con otros altos miembros de la curia romana, según informó el ministro de Asuntos Exteriores de México.
El presidente de Panamá, Ricardo Martinelli, también se trasladó a Roma para asistir al evento.
Martinelli aprovechará de la ocasión para invitar al nuevo Papa a la celebración de los 500 años de la fundación de la Primera Diócesis de Tierra Firme en el continente americano y del descubrimiento del océano Pacífico, que tendrán lugar este año en Panamá, reza un comunicado divulgado por la Secretaría de Comunicación del Estado en un comunicado.
“Estoy muy contento con que el nuevo papa sea latinoamericano, la región donde más católicos hay, por lo que la elección del nuevo papa va a ser muy beneficiosa para la región y para la religión católica, felicitaciones al pueblo argentino”, sostuvo Martinelli tras la elección del nuevo pontífice.
El papa Francisco, que era arzobispo de Buenos Aires, recibe hoy a la presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, la primera audiencia de un jefe de Estado. “Se trata de un gesto de cortesía, de atención hacia Argentina y su presidenta”, ha declarado el portavoz vaticano, Federico Lombardi, que considera “natural” que el Papa reciba a la presidenta de su país de una forma “diferente” al resto las delegaciones que asistirán a la misa de inicio de pontificado, el 19 de marzo.
El cardenal Jorge Bergoglio, de 76 años, fue elegido papa el pasado miércoles tras la renuncia de Benedicto XVI.
