"¡Es una vergüenza! ¡Que nunca más ocurran estas tragedias!"
A sólo 3 meses de su viaje a Lampedusa, en el que interpeló al mundo por "la globalización de la indiferencia", el Papa debió reiterar su llamado a una acción colectiva que ataque las causas de estos dramas: la pobreza, la injusticia, la falta de oportunidades para una vida digna.
Frente a "las numerosas víctimas del enésimo trágico naufragio ocurrido hoy en la costa de Lamepdusa... me viene la palabra vergüenza... ¡Es una vergüenza!", gritó el papa.
Triste ironía: hoy (jueves 3) es el 50º aniversario de la encíclica Pacem in Terris, promulgada por Juan XXIII, y el Santo Padre estaba presidiendo un encuentro organizado por el Consejo Pontificio de Justicia y Paz cuando se enteró de la noticia. "Oremos juntos a Dios –dijo a los participantes de la reunión– por quienes perdieron la vida, hombres, mujeres, niños, por los familiares y por todos los prófugos. ¡Unamos nuestros esfuerzos para que no se repitan tragedias como éstas! Sólo una decidida colaboración de todos puede ayudar a prevenirlas".
Francisco relacionó lo ocurrido con la "inhumana crisis económica mundial, que es un síntoma grave de la falta de respeto por la persona humana".
Apenas enterado de la tragedia, el Papa expresó también sus sentimientos en un tuit: "Oremos a Dios por las víctimas del trágico naufragio en la costa de Lampedusa". (Infobae)