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El presidente de la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (CIDOB), Adolfo Chávez, denunció este viernes que el gobierno del presidente Evo Morales usó al Fondo de Desarrollo Indígena Originario Campesino (Fondioc) para dividir en 2012 a esa organización nacional de pueblos de tierras bajas del país.
Según Chávez, ese año ofrecieron la dirección Ejecutiva del Fondo Indígena a los guaraníes y dijo que el entonces presidente de la APG, Faustino Flores, eligió a Daniel Zapata para dirigir la entidad estatal.
El titular de la CIDOB señaló que Zapata obstaculizó sus proyectos para que las bases lo desconocieran como presidente de la organización porque junto a otros dirigentes, encabezó en 2011 la marcha en defensa del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS). La movilización que se produjo en contra de la construcción de una carretera en medio de la zona ecológica, impulsada por el gobierno del Movimiento Al Socialismo (MAS).
“Él (Zapata) fue el hombre clave para destruir orgánicamente a la CIDOB, propuesto por Faustino (Flores), fue una cuota que ofreció el gobierno y se aprovecharon de los desembolsos que tenían algunos territorios y desde ahí empezó a ser politizado (el Fondo), desde el señor Daniel Zapata”, declaró Chávez a Erbol.
El indígena indicó que luego de la caminata por el TIPNIS, recibieron un “golpe económico” de parte del Ejecutivo porque no sólo les obstaculizaron los proyectos del Fondioc, sino también otros concernientes al manejo forestal y de cuero de lagarto.
“Empieza a politizarse este asunto y entonces el primer golpe que da el gobierno ha sido un golpe de destrucción económicamente a la CIDOB, mediante el bloqueo de los planes de manejo forestal y de precintos de cuero de lagarto, el permiso, y de apoderarse del Fondo Indígena; entonces ha sido certero el golpe del gobierno para hacer una sumisión de algunos territorios, de algunos dirigentes a quienes les dijeron si estaban con Adolfo no habrán proyectos”, afirmó.
“Cambalache”
En 2012 se dio la división de la CIDOB. Melva Hurtado asumió la dirección paralela de la organización indígena, como una aliada al gobierno del MAS, pese a que en 2010 la Gran Asamblea Nacional de Pueblos Indígenas (Ganpi), reeligió a Chávez como presidente, hasta 2015.
El dirigente indígena indicó que se hizo un “cambalache” para su destitución, es decir, según Chávez, el gobierno puso a Hurtado al frente de la CIDOB y a cambio ofreció a Flores, como representante de los guaraníes, la dirección Ejecutiva del Fondo Indígena.
“Utilizaron al señor Faustino para cambiar la dirigencia de la CIDOB porque así se manejó, le propusieron ellos (gobierno) a doña Melva Hurtado a cambio de que también don Daniel Zapata asuma el Fondo Indígena; o sea, hubo cambalache, o sea se negoció la destitución de la CIDOB”, aseveró.
Zapata asumió en junio de 2012 la dirección de la entidad estatal, en lugar de la representante de las Bartolinas, Elvira Parra, quien tiene detención preventiva en la cárcel de mujeres de Obrajes, responsabilizada por aparente corrupción en el Fondioc. En tanto, en julio de ese mismo año, nombraron a Hurtado como principal dirigente de la CIDOB, desconociendo así a Chávez. Ese mismo mes se produjo la toma de la sede de la organización indígena, que se encuentra en Santa Cruz, de parte del grupo de Hurtado.
Para Chávez este fue el inicio de la corrupción en el Fondioc. Pidió se investigue a Flores. Erbol intentó contactarse con el expresidente de la Asamblea del Pueblo Guaraní (APG), Faustino Flores, pero el teléfono móvil del indígena, que actualmente es fuertemente cuestionado por el Consejo de Capitanías de Chuquisaca (CCCH) porque supuestamente usa a esa organización con afanes políticos, se encontraba apagado.
Daniel Zapata está desaparecido desde que la Fiscalía, que investiga el supuesto desfalco de 71 millones de bolivianos del Fondioc, emitió a inicios de marzo una orden de aprehensión contra él por no presentante a declarar, ya que la Contraloría General del Estado le inició un proceso penal, junto con otros exdirectores: Parra y Marco Antonio Aramayo, por no fiscalizar, ni encargase del monitoreo de los proyectos productivos que se aprobaron desde 2009.
En la APG, que actualmente tiene como presidente a Domingo Julián, optan por el silencio. Algunos de los dirigentes aseguran que no conocen el paradero de Zapata. En tanto, otros, que prefieren mantener en reserva sus nombres, aseguraron que no huyó del país. Se informó que se encuentra enfermo en su comunidad de la Capitanía Ipaguazu, ubicada en el municipio de Gutiérrez del departamento cruceño.
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