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El vicepresidente de la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (CIDOB), Lucio Ayala, asumió la presidencia de forma interina de esa organización, aliada al gobierno del presidente Evo Morales.
La medida fue asumida luego de que la titular de ese sector, Melva Hurtado, ha sido recientemente detenida en una cárcel de la ciudad de La Paz, debido a su supuesta participación en actos de corrupción en el exFondo de Desarrollo Indígena Originario Campesino (Fondioc).
La vicepresidencia de la CIDOB está a cargo del dirigente Rafael Álvarez, quien antes ocupaba el cargo de la secretaría de Medio Ambiente. Álvarez dijo a Erbol, en tanto, Hurtado esté ausente “la organización estará conformada de esta forma”.
Descartó que se convoque a una comisión nacional para elegir una nueva directiva, puesto que el directorio, elegido en 2012, al frente de Hurtado no concluyó su gestión de cinco años.
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