- 3684 lecturas
La Organización Indígena Chiquitana (OICH) se alejó en 2008 de la Central de Pueblos Étnicos de Santa Cruz (CPESC) para tener representación propia ante la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (CIDOB), situación que generó malestar en sus bases y finalmente una fractura con directorios paralelos, sin remedio hasta la fecha.
El dirigente de la CIDOB de Adolfo Chávez e indígena chiquitano, Lázaro Tacoó, contó a Erbol que la división se acentuó luego de las dos marchas en defensa del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS), entre 2011 y 2012. Y aún más, tras las elecciones generales de 2014, cuando aparecen dos dirigencias; una al frente de Justo Seoane y la otra liderada por Emigio Poiché.
Seoane, exministro de Asuntos Indígenas del gobierno del expresidente Carlos Mesa y exalcalde del municipio de Concepción por el Movimiento Al Socialismo (MAS), se opuso a que las comunidades chiquitanas, que decidieron mantenerse en la CPESC, conformen su propio partido político para hacer frente al oficialismo.
Tacoó responsabilizó a Seoane, José Bailaba, Carlos Wasase, Vicente Pesoa y Pascual García de conformar una “elite indígena” en la provincia Ñuflo de Chávez para dividir a la OICH y evitar nuevos liderazgos.
“Es una élite indígena de la provincia Ñuflo de Chávez, de Concepción, ellos no permiten que haya nuevos liderazgos en el pueblo Chiquitano. Ellos se alejaron de la CPESC, pero otros grupos de chiquitanos lo que hicieron fue continuar en la CPESC y se crearon los paralelismos para continuar en la CPESC”, declaró a Erbol.
Otra directiva
Emigio Poiché pasó este año de dirigente de la OICH a asambleísta departamental de Santa Cruz. Eulogio Pachuri fue elegido como el nuevo representante se ese grupo. Mientras Seoane se mantuvo al frente del otro directorio.
El grupo de Seoane logró que la Asamblea Legislativa Departamental de esa región destituya a Poiché y en su lugar demandaron el reconocimiento del excandidato oficialista a la Alcaldía de San Miguel de Velazco, Pedro Damián Dorado, convocando a una movilización.
Seoane aprovechó un acta de acuerdo para proyectos productivos que firmaron Poiché y Pachuri con la Gobernación de Santa Cruz, para que sean desconocidos, profundizándose la división, indicó Tacoó.
La marcha de Seoane partió en septiembre para el reconocimiento de Dorado en la Asamblea, pese a que se alcanzó ese objetivo, la caminata, desde Concepción a la ciudad cruceña, no se detuvo, pero ya con otros pedidos como la redistribución de regalías.
Devuelta a la CPESC
El grupo de Pachuri calificó la movilización de Seoane de política. Mientras la movilización logró en los últimos días que el gobernador Rubén Costas los reciba y se inicie un diálogo con los legisladores departamentales para tratar sus demandas. Sin embargo, el diálogo fue roto hoy, se informó desde Santa Cruz.
Anteriormente Seoane indicó que no existía voluntad de parte de los legisladores para atender sus pedidos, entre ellos el reconocimiento de su organización y él como principal representante. Indicó que la CIDOB que dirige Melva Hurtado, aliada al gobierno del presidente Evo Morales, los avala, así como la CPESC.
Aseguró que al estar al frente de la OICH no tiene ninguna afinidad política, menos con el MAS.
“No hay ninguna élite, son diez centrales las que nos apoyan como dirigentes, prueba de ello reconocen nuestra estructura, tanto nuestras bases y nos reconoce la CIDOB”, aseveró.
“El tal Eulogio Pachuri es el elemento principal, el peón, que manda la Gobernación para dividirnos con plata de la Secretaría de los Pueblos Indígenas”, aseveró Seoane.
Mientras el grupo de Pachuri intenta retornar al seno de la CPESC, que al momento también se encuentra descabezada.
- 3684 lecturas