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Dos de los indígenas asesinados durante el paro agrario en Colombia recibieron el impacto de un arma de fuego cargada con material artesanal no convencional, según necropsia del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses. Líderes de paro rechazan informe.
Los dos indígenas asesinados durante la represión contra la Minga Agraria en Colombia presentaron heridas por proyectil de arma de fuego, compatibles con carga múltiple, sin embargo, los elementos recuperados corresponden a “material artesanal no convencional”.
Así lo determinó el Instituto de Medicina Legal, luego de practicarle la necropsia a los cuerpos de Marco Aurelio Díaz, de 25 años; y Gersaín Cerón, de 29 años, quienes murieron el jueves pasado, durante la protesta del paro agrario en la Vía Panamericana, en el Cauca.
De acuerdo con los expertos, los dos indígenas tuvieron heridas en el tórax, lo que les ocasionó lesiones en “órganos vitales y hemorragia masiva”.
"Fue un arma no convencional, pero el impacto no fue producido por una honda o una cauchera, se trató de un arma de fuego con munición modificada. No es la primera vez que se denuncia la utilización por el ESMAD (Escuadrón Móvil Antidisturbios) de armas a las que se le echan objetos contundentes como balines, canicas de vidrio, es decir munición recalzada", aseguró al respecto el coordinador del Tejido de Defensa de la Vida y los derechos humanos de Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (ACIN), Mauricio Lectamo.
Líderes del paro rechazan informe
Voceros indígenas rechazaron el informe señalando que en el momento en que ambos fueron heridos, hacían parte de la minga indígena, reclamando los derechos de las comunidades y se produjo un enfrentamiento con la fuerza pública.
"Tenemos imágenes de que acá hubo un enfrentamiento, nosotros no aceptamos ese informe a pesar de que Medicina Legal dice que fue con armas no convencionales", expresó un dirigente del paro al diario El Tiempo.
En contexto
Los campesinos, indígenas y trabajadores del campo realizan un paro por la falta de cumplimiento de los compromisos adquiridos por presidente Juan Manuel Santos en 2014, en la Cumbre Agraria de entonces.
Se espera que unas 100 mil personas participen en esta protesta que se realiza de forma indefinida en Colombia.
Hasta el momento, las acciones de la policía antidisturbios han dejado tres indígenas muertos, más de 135 heridos y varias detenciones arbitrarias desde este lunes cuando comenzó la Minga Agraria.
Desde diversos puntos del país se oponen a las políticas gubernamentales que responden a los Tratados de Libre Comercio y se expresan en el Plan Nacional de Desarrollo (PND) que pone en venta los recursos estratégicos de la nación.
La Coalición de Movimientos y Organizaciones Sociales de Colombia (Comosoc) denunció que el Estado ha criminalizado, intimidado y estigmatizado la protesta social. (TelesurTV)
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